Valentina Barrios ha probado de todo. La actriz y comunicadora participó en una película de suspenso, conduce un programa de música y este año se animó a la competencia culinaria de Masterchef Celebrity. Y si de otros sabores se trata, revela que volvió a incorporar la carne a su dieta después de cuatro años de practicar el vegetarianismo. “Al principio lo sentí como una traición a mí misma”, admite en diálogo con Sábado Show. La multifacética artista cuenta los pormenores de su incursión en el famoso reality y en el plano personal recuerda la fallida boda que preparó y debió cancelar justo al inicio de la pandemia. “Me da pereza organizarla otra vez”, explica.

-¿Cómo te llevas con este nuevo desafío de participar en Masterchef Celebrity (Canal 10)?

-Es un desafío muy grande. Me gusta cocinar y lo hago seguido en mi casa, pero no preparo cosas muy elaboradas. Cuando me llegó la propuesta me pareció algo diferente que implicaba salir de mi zona de confort, así que no lo dudé.

-¿Sufrís la competencia?

-Se siente una presión a la que una no está acostumbrada. Es tremendo. Hay más nervios y adrenalina de la que uno se imagina cuando mira el programa por televisión. Llego a transpirar de los nervios que se viven en la competencia. Pese a eso lo estoy disfrutando mucho y es una gran oportunidad para que la gente que me conoce por Mejor por Música me vea en otra faceta. En esa cocina uno muestra cómo es realmente, sale la esencia de cada uno.

-¿Qué impresión tenés del jurado?

-Muy buena. Sergio (Puglia) es con el que tengo más feeling, mientras que el francés (Laurent Lainé) es el más distante.

-¿Cómo es la relación con el resto del elenco?

-Es un buen equipo. Pegué buena onda con Monti, Tav Lust, Adriana Da Silva, Emilia Díaz, Anita Valiente, Pía Fernández y Emiliano Lasa. Tenemos un grupo de Whatsapp y nos compartimos recetas. Por ahora hay mucho compañerismo, hay que ver qué pasa cuando la competencia se ponga más difícil.

-¿Cómo te llevás con El Menor, uno de los personajes revelación del programa?

-Me llevo muy bien. Es muy gracioso, ingenuo, espontáneo, sensible, transparente y va con toda su alegría. No le importa el qué dirán. Yo no conocía su música porque no es mi estilo, pero es muy popular y tiene tremenda llegada. Lo conocí como persona y me cayó muy bien más allá de su rol como artista. Se lleva bien con todos.

-¿Cómo te preparaste para la competencia?

-Me preparé mucho. Tomé clases, busqué recetas y leí libros de todos lados. Andy Vila regaló libros de cocina que nunca había usado. Hablé con Paula Silva, que ganó la segunda temporada y me pasó algunos tips. Empecé con tiempo para prepararme con cosas con las que no me siento tan cómoda, como las carnes o comida frita que no hacemos en casa.

-Fuiste vegetariana durante mucho tiempo, ¿te costó manipular o trabajar con carne en la cocina?

-Estoy practicando eso. El otro día compré un pollo entero y lo desarmé por las articulaciones, que es la forma de la que hay que desarmarlo. Quebré y descuarticé todo al pobre pollito. También aprendí a pelar los langostinos. Los compré crudos en el puerto y aprendí a limpiarlos bien. En la parte de arriba tienen una línea negra que es el intestino, el cual a veces no se lo sacan cuando te los sirven en algún restaurante. Hay que hacer toda una maniobra con el escarbadientes para sacárselo y que quede más sabroso, ¡pero hacerlo es asqueroso! Le estoy perdiendo el miedo a eso para no enfrentarme a este tipo de situaciones de la nada en la mitad de la competencia. Estoy haciendo cosas básicas para no sufrir de antemano, porque si me llegan a dar una achura rara o unos sesos asquerosos no sé cómo puedo reaccionar. Se me va a revolver el estómago, pero creo que como soy bastante competitiva y me gusta dar lo mejor voy a superar ese tipo de obstáculos.

-¿Por qué dejaste de ser vegetariana?

-Dejé cuando quedé embarazada. Al estar gestando una persona, una está más cansada y precisa más energía, entonces empecé a comer carne por las dudas. Por suerte lo hice porque después de que nació Sur tuve una anemia tremenda y la médica me dijo que puede haber sido por los años en los que fui vegetariana. Al día de hoy sigo comiendo carne.

-¿Cómo fue la primera vez que volviste a probar carne?

-Es que nunca me pasó eso de sentir asco por la carne. La primera vez probé asado y me cayó mal, no lo digerí bien. Al principio mi cuerpo la rechazaba porque se había acostumbrado a no comer ese alimento. Fue como una traición a mí misma y a la filosofía que practiqué durante tanto tiempo, pero como estaba embarazada la prioridad era mi bebé. Quise estar tranquila, y después del embarazo seguí comiendo carne. No dejé de comer las comidas que hacía cuando era vegetariana, pero ahora voy a un asado y disfruto todo.

Foto: Leo Mainé. Producción: Jorge Cruz. Locación: Polo Bamba (Hotel Montevideo)

-Con Mejor con Música y Masterchef, ¿sentís que ha quedado relegada tu faceta de actriz?

-La faceta de actriz siempre está latente y una la pone en práctica todo el tiempo, en las redes sociales o jugando con mi hijo. Extraño hacer teatro, pero es algo que demanda mucho tiempo y es difícil tomar un trabajo así cuando una tiene un hijo chico. Este año que ya está más grande tengo ganas de volver a las tablas. Me tienta hacer una obra infantil. Actuar me relaja y es terapéutico para mí.

-Actuaste con el Loco Abreu para una publicidad, ¿cómo fue esa experiencia?

-Hicimos juntos todo el comercial y pegamos buena onda. Hablamos un par de veces por Instagram sobre cómo quedó el spot. Me dijo que le había gustado el resultado. Él es encantador y se conquista a todo el mundo.

-¿Cómo ves el crecimiento de tu hijo Sur, que está por cumplir dos años?

-Los primeros años una no se quiere despegar y está todo el tiempo pendiente. Ahora que está más grande estoy trabajando más y puedo hacer más cosas fuera de casa. Voy a hacer un viaje en pareja sin él por primera vez. Sería como la luna de miel que nunca fue. Tenemos una niñera que es una genia y me quedo tranquila con esa ayuda.

-El año pasado lo llevaron de viaje a Europa cuando apenas había cumplido un año, ¿cómo se portó?

-Fuimos a Menorca. Fue difícil porque recién tenía un año y el viaje es muy largo. Él no se quedaba quieto, no soportaba quedarse en el asiento. Recomiendo hacer esos viajes largos cuando son todavía más bebitos, que no necesitan moverse tanto. Sur es movedizo y quería agarrar los bolsos de las personas que estaban al lado. Mientras todos dormían yo hacía malabares con él. La diferencia de horario también fue brava porque los niños chicos precisan rutinas definidas. Después de superar eso pasamos divino y disfrutamos mucho en familia.

-Tu casamiento quedó trunco en 2020 a causa de la pandemia, ¿has pensado en retomar esa iniciativa?

-Yo me iba a casar en abril de 2020 y lo cancelamos cuando aparecieron los primeros casos de Covid en Uruguay. Hoy me preguntan cuándo nos vamos a casar pero me da pereza organizar todo otra vez. Ya formé una familia, no me siento motivada como para hacerlo.

-Se te ve trabajando con varias marcas en redes sociales, ¿cuánto le dedicás a ese rol?

-Mucho, trabajo con varias marcas en mi Instagram. Trato de seleccionar y promocionar cosas que realmente uso. Una cosa es hacer un casting para el personaje de una publicidad, pero otra distinta es mostrarme como Valentina recomendando un producto en mis redes personales. No puedo mostrarme recomendando comida sana, y después promocionar un refresco, por ejemplo. Siento que tengo que mostrar productos que sirvan de verdad y que yo consuma.

-¿Nunca recomendaste un producto del que después te hayas enterado que era malo?

-Me pasó de creer que algo estaba bueno y después resultó que no era tan así. Yo ya estaba comprometida, así que hice la publicidad igual pero sin poner mi mejor cara. Fue cuando recién empezaba, ahora soy más selectiva. Si viene una marca de la que no soy fan tiene que valer mucho la pena para promocionarla.