ENTREVISTA
La exparticipante de "La Voz Uruguay" habla de su carrera en la música, su pasión por el periodismo y su presentación en el festival de Lavalleja
Hace mucho que canta y dice que se ha presentado a distintos concursos en Uruguay y Argentina, pero que recién con La Voz Uruguay logró pasar la etapa de audiciones gracias a una íntima versión de “Para hacerte sentir mi amor”. En el programa de Canal 10 integró el Team Lucas y llegó hasta la semifinal. Además de la visibilidad que le dio el concurso, Yandira Castro integra el equipo de corresponsales de Subrayado, un trabajo que, dice, también le apasiona. En esta entrevista con Sábado Show, la minuana oriunda de Montevideo habla del camino recorrido, sus anteriores experiencias en los certámenes musicales, el periodismo y la presentación que realizará, mañana a las 18.00 junto a su banda, en una nueva edición de la Semana de Lavalleja.
—¿Cómo se vivió la experiencia de haber participado de La Voz Uruguay?
—Divino. Fue tremenda experiencia. Yo venía con un rodaje de muchos concursos, pero de los que me presenté fue el más académico. Yo no me imaginaba ni pasar el casting, porque cuando abren ese tipo de llamados donde mandás un video, la amplitud de estar en tu casa y no tener que presentarte ante nadie te da hace que mucha más gente se presente. Entonces, cuando mandé el video me dije: si paso esta etapa es un gol porque mucha gente se va a presentar, y así fue. Tuve la suerte de hacer el casting presencial en Maldonado y que me dijeran ese mismo día que había quedado. No tuve que esperar los meses para que te llamaran. La experiencia fue distinta a los anteriores concursos porque arranqué con el pie derecho.
—¿Te habías puesto alguna meta en el concurso?
—Con llegar a las audiciones me sentía conforme porque esa etapa iba a estar buenísima. Y lo demás me sorprendió. La audición la pasé bien a mi estilo, en el último suspiro.
—En esa primera instancia cantaste “Para hacerte sentir mi amor” de Bob Dylan pero en la versión de Laura Canoura. Una apuesta arriesgada.
—La canción es hermosa pero era redificil para un concurso de canto porque es muy intimista. Por lo general la gente está acostumbrada en estos concursos a que el intérprete explote todos sus recursos en ese minuto, y esa canción es todo lo contrario. Es muy para adentro y era difícil porque al ellos no poder verme y yo no tener nada que ofrecer más que la voz, esa audición para mí es la más desnuda que tiene un cantante. Estás sola tu voz, sin poder usar ningún otro recurso a tu favor. Entonces fue un desafío muy grande.
—Tenés ese vozarrón grave todos los días, ¿cómo era tener esa voz antes de La Voz?
—La voz grave siempre la tuve, incluso desde chica. A los 16 se me formó un poco más y estuve mucho tiempo dedicándome al tango y al blues porque eran los lugares donde estaba más cómoda. Después me fui formando para mejorar mis debilidades, y sigo estudiando hasta hoy.
—¿Qué te gusta de tu voz?
—Lo que más me gusta es lo diferente de mi voz, porque no hay muchas mujeres contraalto con registros bajos, creo que somos muy pocas. Y me pasa eso con Laura Canoura que me encanta, adoro escuchar esas mujeres con voz con cuerpo, graves, porque me siento identificada.
—Además de La Voz, en estos últimos meses llegaste a Subrayado como corresponsal de Minas.
—Era corresponsal de Minas antes de La Voz, renuncié a mi puesto para presentarme al concurso porque era una condicionante, y ahora retomé mi trabajo porque soy cantante y periodista también. Las dos profesiones me apasionan. Si bien ahora estoy más dedicada al arte que al periodismo, estoy empezando a retomar.
—Imagino participar en La Voz te dio una mayor visibilidad a la de la periodista.
—Sí, zarpado. Había estado en pila de concursos, algunos televisados y todo, pero eran otras épocas y no existían las redes sociales. Hoy todo lo que pasa en la televisión se replica en internet y eso hace que sea más masivo, y siento que me pasó eso. Yo toco desde que tengo 11 años y tengo 33, y tengo banda en Minas desde hace 10 años, y nos pasó que después de La Voz, cuando vamos a tocar a algún lado, la gente nos conoce o nos está esperando. Esa es una sensación divina y es algo impensado porque nunca nos había pasado. En Minas la gente me conoce porque vivo acá desde hace varios años, pero el cariño de la ciudad se maximizó con el programa, porque era la representante de la ciudad. No sé si es que aumentó el cariño de la gente, pero se nota mucho más. Me pasa que me paran en la calle, me saludan y me quedo un rato hablando con la gente. Es parte del sueño que todos los artistas tenemos y que en el camino que es largo y tiene sus frustraciones, el máximo sueño al que uno aspira: que el otro te conozca y reconozca el trabajo.
—Es una industria un tanto ingrata, donde hoy estás y mañana puede que no.
—Sí, me preguntaron en La peluquería de Don Mateo si eran cinco minutos de fama. Para mí sí, son cinco minutos pero si no los sabés laburar y tenés disciplina para seguir remándola y no te descansás en esos minutos, se te pasan porque mañana empieza otra temporada de La Voz, va a haber otros cantantes con sus talentos y lo que pasó, pasó.
—Antes hablabas de otras experiencias en otros concursos de talentos. ¿En qué programas estuviste?
—En El casting de La Tele, en la versión uruguaya y en la argentina. También en todas las ediciones de Conrad busca su estrella, en el de Maroñas que también fue televisado y en concursos no televisados como La guitarra de Chalar, La guitarra negra. En cuanto concurso se me pasó por el medio me presenté. Cuando vino Soñando por cantar a hacer el casting me presenté. Ese fue de los más terribles porque fueron como 27 horas de cola y te dejaban cantar como 30 segundos. Era una nada, entrabas, abrías la boca y te ibas. En el de acá no quedé, era joven y me dije: me voy a Buenos Aires. Me presenté y tampoco quedé. La vida del artista es como un casting permanente, salís de uno y entrás en otro, porque son las puertas que tenés para hacer la diferencia, para que te vea alguien más.
—Por lo pronto ya tenés fecha en la Semana de Lavalleja.
—Sí, vamos a estar mañana en la Semana de Lavalleja. En realidad no es la primera vez que voy a estar, pero sí va a ser la primer vez que voy con mi nombre. Por lo general siempre pertenecí a alguna banda local, entonces es un show muy importante para mí. Porque es tocar en tu casa, en el festival de tu ciudad y uno de los más importantes del país, es otra dimensión. En un escenario más profesional y donde todo es más masivo. A su vez es la primera vez que me voy a presentar con una banda completa. Somos 11 personas trabajando para este show que laburamos todo el año, así que va a ser la primera vez que la gente va a poder ver el formato de Yandira con banda completa, como nos presentaríamos en grandes escenarios si podemos seguir por este camino.
—¿Cuál va a ser el repertorio?
—Vamos a mostrar tres canciones nuestras, de la banda, que ya grabamos y vamos a lanzar en diciembre porque antes no se puede. Tengo contrato con La Voz y Universal y entonces no podemos lanzar música propia hasta que finalice. Y después armamos un repertorio que está compuesto por clásicos de la música, versionados a mi estilo. Armamos un espectáculo medio divertido porque es un domingo a las 18.00 y después de nosotros viene Martín Piña y Matías Valdéz, entonces vamos a hacer algo en la sintonía para lo que viene después.
—Así que vas a hacer algunas cumbias, ¿cómo se adapta la voz a ese género?
—Alguna cumbia hacemos porque me gustan todos los géneros. Será porque a lo largo de la vida, por tocar en bares y boliches vas adaptando el repertorio a lo que la gente quiere escuchar. Y esta banda, al tener vientos y percusiones tiene la llegada para hacer cualquier género.