Redacción El País
Aunque parezca mentira, hay un electrodoméstico que es gran consumidor de electricidad sin siquiera estar encendido. Se trata del televisor, un aparato que sigue consumiendo energía eléctrica cuando está en modo de espera.

Este fenómeno, conocido como consumo en espera o "standby power", se debe a que los electrodomésticos modernos están diseñados para estar siempre listos para recibir una señal de encendido rápido, lo que implica que mantienen ciertos componentes en funcionamiento incluso cuando están apagados.

Según estudios recientes, un televisor promedio puede consumir entre uno y cinco vatios en modo de espera. Aunque esta cifra puede parecer pequeña, al ser un aparato que se encuentra en la mayoría de los hogares y permanece en ese estado durante largos periodos, el consumo acumulado puede ser significativo. En una vivienda con varios televisores, el consumo global puede llegar a ser equivalente al gasto energético de varios electrodomésticos en pleno funcionamiento.

Foto: Freepik.

Un televisor que consume cinto vatios en espera y que permanece así durante 24 horas al día, durante un mes, puede gastar aproximadamente 3.6 kilovatios-hora (kWh) de electricidad. Esto, multiplicado por todos los aparatos en espera en un hogar promedio, genera un impacto más grande.

Por ejemplo, si se consideran otros dispositivos en modo de espera, como cargadores de teléfonos, equipos de sonido, o sistemas de videojuegos, el consumo en espera puede representar entre el 10% y el 15% del consumo total de electricidad de un hogar, dependiendo del tamaño y del número de aparatos.

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• Desconectar aparatos: Cuando no se necesiten, desconectar los aparatos de la corriente eléctrica es una forma eficaz de eliminar el consumo en espera.
• Utilizar enchufes inteligentes: Estos enchufes pueden ser programados para cortar la electricidad en ciertos horarios o pueden ser controlados de forma remota, ayudando a gestionar el consumo en espera de manera más eficiente.
• Optar por electrodomésticos más eficientes: Algunos electrodomésticos están diseñados para consumir menos energía en modo de espera. Buscar productos con certificaciones de eficiencia energética puede ser una inversión a largo plazo que reduce el impacto del consumo en espera.
• Revisar el uso de modos de espera: Algunos televisores y dispositivos permiten ajustar la configuración para reducir el consumo en espera. Revisar los manuales y ajustar las configuraciones puede hacer una diferencia notable.

Al final del día, cada pequeño esfuerzo cuenta. Con simples ajustes en nuestros hábitos de consumo energético, podemos hacer una gran diferencia en la reducción de nuestro impacto ambiental y en el ahorro económico a largo plazo.