En la apertura del segmento de Alto Nivel de la Conferencia de las Partes (COP16) de Naciones Unidas sobre Biodiversidad, que además sirvió para el lanzamiento de la coalición mundial “Paz por la naturaleza”, Gustavo Petro, presidente de Colombia, país anfitrión, criticó “la falta de acción que se presenta en el mundo en torno al principal problema de la humanidad”. “Estamos comenzando el tiempo de la extinción humana y creo que no estoy diciendo una exageración”, enfatizó.

Su discurso tuvo un fuerte contenido político, que incluyó referencias al conflicto entre Israel y Hamás; a la política de Estados Unidos hacia Venezuela; a la crisis de refugiados en todo el mundo y también a China, "dueña de la mayor parte de la deuda del mundo", de la que se preguntó: “¿socialistas o capitalistas?”. Pero Petro centró especialmente sus cuestionamientos en los combustibles fósiles y a “los dólares generados por el petróleo extraído”.

“El petróleo no es más para nosotros que la significancia de la muerte absorbida por el planeta y vuelta energía combustible que nosotros usamos para la codicia, para la reproducción ampliada del capital, en la que unos ganan y los demás trabajamos para ellos (...). En la explotación está la explicación del fin de la humanidad”, opinó.

Foto: Patricia Vicente

El presidente colombiano sostuvo que “en las fábricas de la codicia no se está construyendo la riqueza del mundo, no la estabilidad económica, sino la muerte de nosotros mismos”. Una parte del petróleo va la atmósfera y "la otra se convierte en dólares y euros, y va a los fondos de capital de Wall Street o de la City de Londres y esos fondos nos prestan a nuestros países a altas tasas y nosotros vivimos endeudados (...). Nos ordeñan, literalmente, nos explotan. La riqueza en dólares del petróleo se vuelve deuda en nuestros países y nos la cobran con tasa de riesgo", criticó.

“Que la gente tome las riendas”

Defendió que la COP se haga en un lugar rodeado de la gente, del pueblo, y dijo que se eligió especialmente no hacerla en el desierto o en el medio de la nieve: “Allí la burocracia y los que hacen la política se reúnen para tomar decisiones a nombre de los demás, que son miles de millones de personas diferentes a ellos”. “Eso no es más que temor a que la gente tome las riendas y el control para salvar la vida en el planeta”, aseguró.

"Hay que meterle democracia a las decisiones”, dijo Petro y sostuvo que “la intermediación burocrática” solo tiene como razón de ser que “los intereses de la codicia” se impongan en el mundo. “La codicia contra la vida, la codicia contra la humanidad”, espetó, y remató: “La codicia tiene un modo de producir que busca la ganancia y tras la maximización de la ganancia, la maximización de la destrucción de la vida en el planeta. Se necesita otra manera de producir para resguardar la vida planetaria”.

Foto: Patricia Vicente

“No sigamos haciendo lo mismo”

Petro reclamó a los países del mundo que comiencen a tomar nuevas acciones para luchar contra la crisis climática. ¿Quién cree que para solucionar un problema del tamaño de la crisis climática, que es la contaminación de toda la atmósfera por las fábricas de la codicia, se pueden usar las mismas herramientas de siempre? Algunos expertos neoliberales de la economía dominante dicen que el mercado va a superar por sí mismo la crisis climática si se pone una tasa al carbón. Así, el mercado muere antes que la humanidad”, agregó.

“La crisis climática no se resuelve a través de la rentabilidad o la tasa de interés y si seguimos pensando que el mercado financiero va a resolver los mecanismos de financiación del comienzo de la extinción de la humanidad, nos estamos equivocando cuando ya se nos agota el tiempo y no podemos perder ni un minuto más”, enfatizó. "Hay que hablar de poder público de nuevo, no de mercado. No digo que se quite el mercado, digo que el poder público debe existir y regular. Esta vez es un poder público global y democrático", dijo.

El mandatario cuestionó también si en la sociedad actual "es más valioso el dólar que la vida", algo que justificaría el "porqué en las reuniones de los dirigentes políticos del mundo no se toman decisiones que toca para salvar la vida, para salvar el planeta", porque "importa más el dólar que la vida".