En medio del monte rochense, en un lugar donde la señal de teléfono móvil no siempre funciona, un amante de la cerveza instaló su propia planta artesanal. Se llama Ezequiel Domínguez —mejor conocido como ‘Kele’—, vive en las sierras de Rocha desde hace 20 años y pronto lanzará una bebida a base de yerba mate, refrescante, gasificada y con un toque cítrico.

No es una idea nueva. La primera bebida a base de esta planta —de la marca Club-Mate— nació en Alemania en 1924 y se consume principalmente en Europa, Estados Unidos y Chile. Pero el valor de la propuesta de Kele está en que va de la mano del desarrollo local y busca, a largo plazo, promover el cuidado de la Ilex Paraguariensis —planta de yerba mate— y los ecosistemas en donde vive.

Kele comenzó su emprendimiento ‘Cervecería Dragones’ hace 12 años y terminó de construir el “templo cervecero” hace cinco. Forma parte de Tierra Comunal, un espacio comunitario de familias del ámbito rural que ofrece actividades y alojamiento. La cerveza no sale de las sierras; de hecho, se vende solamente entre los vecinos y visitantes. “La idea es que la gente venga y conozca la zona en lugar de aumentar la producción y crecer en otros lugares”, expresó el emprendedor a El País.

Con la bebida a base de yerba mate es distinto. En ese caso, el objetivo es lograr un perfil “mucho más comercial y profesional” y para eso cuenta con el apoyo de la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE), la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), Ambá —una organización sin fines de lucro que busca restaurar el vínculo emocional del ser humano con la naturaleza y regenerar los ecosistemas— y Ruta de impacto, una iniciativa donde empresas y emprendimientos de triple impacto promueven y generan actividades alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Kele denominó a su nueva bebida ‘elixir de yerba mate’ y explicó que se trata de una infusión y no de un fermento. Recibió la guía del argentino Claudio Centrone, farmacéutico y referente de la cerveza artesanal, “un hombre con muchísimo conocimiento que ofreció su asesoría de forma honoraria”. Estuvo una semana en las sierras y en ese tiempo llegaron a una receta “muy parecida a la que será la definitiva”.

El uruguayo realizó una primera etapa de producción y ahora toma muestras cada 15 días para evaluar el estado de la bebida a través del tiempo. Trabaja junto a estudiantes avanzados de la Universidad Tecnológica del Uruguay (UTEC) para hacer estos análisis y a la vez conocer si el producto entra o no dentro de los estándares de lo que es una bebida energética. Después viene la parte de etiquetar, terminar el diseño de marca y hacerle llegar la bebida a expertos del ámbito de la gastronomía —contó—, cosa que espera estar haciendo entre octubre y noviembre de este año.

Foto: Cortesía Cervecería Dragones.

En 2019, la ONG Ambá descubrió un predio con más de mil ejemplares de yerba mate, muy cerca de donde Kele tiene su planta de producción artesanal. “El encuentro con estos árboles activó la posibilidad de que a futuro este proyecto pueda fusionarse con la recolección y obtención de hojas de forma local”, señaló el emprendedor. No obstante, aún no existe en Uruguay una producción estabilizada; por eso, por el momento Kele trabaja con materia prima importada de Brasil.

Según un artículo publicado en la página web de la Cámara de Diputados, el árbol de yerba mate se ha identificado de forma silvestre en Rocha, Maldonado, Durazno y Cerro Largo, donde hay “miles de ejemplares que han pasado casi desapercibidos a lo largo del tiempo”. Además, señala que se presentan condiciones adecuadas para la plantación de esta planta en Rivera, Tacuarembó, Cerro Largo, Maldonado, Treinta y Tres, Rocha y Lavalleja.

“Cuando se pueda saber cuántos kilos son potencialmente extraíbles sin dañar, cuando exista un proceso de secado y estacionado estable… Ahí podremos pasarnos a la yerba mate local”, subrayó Kele, y agregó que el hecho de que la bebida salga al mercado sirve para que más personas se interesen por la producción de yerba en Uruguay.

La directora de Ruta de impacto, Karina Guerrero, dijo a El País que este proyecto se alinea con su propósito de “inspirar buenas prácticas, conectar agentes de cambio y crear soluciones que generen bienestar en las personas y el planeta”. En efecto, mencionó que contribuye a los ODS 1, 12 y 15 de la siguiente manera:

• ODS 1: Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo. La propuesta de Kele “genera oportunidades laborales para la comunidad de las sierras de Rocha”, señaló Guerrero.
• ODS 12: Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles. “Las materias primas que usa son cosechadas en la zona y existe un proyecto regenerativo para la planta de yerba mate que asegura la disponibilidad y conservación de la especie”, resaltó.
• ODS 15: Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad. En este sentido, explicó que “la técnica regenerativa del cultivo colabora en la conservación de bosques y especies, evitando la degradación de la tierra y protegiendo la biodiversidad de la zona”.

Foto: Tatiana Scherz Brener.

Estamos acostumbrados a tomar mate, pero ¿habrá lugar para tomarlo de otra manera? Eso es lo que Kele intenta responder en el programa Validación de Ideas de Negocios (VIN), un instrumento creado por ANDE y ANII que brinda acompañamiento de una Institución Patrocinadora de Emprendimientos (IPE VIN) —en este caso, la institución es Ruta de impacto—, asesoría técnica y financiamiento no reembolsable de hasta $ 200.000.

La clave está en que el ‘elixir de yerba mate’ no viene a sustituir el mate como lo conocemos. De hecho, la idea es que sí ocupe el lugar de otras bebidas, como las gaseosas, de modo tal que la gente pueda refrescarse con ingredientes de origen natural.

“Vamos a sacarlo adelante y ver cómo lo recibe el mercado. Si no tiene éxito específico en el ámbito local, tenemos la posibilidad de enfocarlo en los turistas y trabajar, por ejemplo, con los hoteles. Pero la idea inicial es que funcione con los uruguayos”, finalizó Kele.