El Plan Universal de Saneamiento, en la primera etapa del proyecto se construirá la infraestructura necesaria para atender 61 localidades del interior del país. Las obras a realizarse comprenderán 850 kilómetros de redes de colectores de saneamiento, 55.000 conexiones domiciliarias, y obras intradomiciliarias de las nuevas conexiones,
Además se construirán 42 nuevas plantas de tratamiento de líquidos residuales, y la complementación de tres plantas de tratamiento existentes, su operación y mantenimiento por los primeros dos años de puestas en funcionamiento.
El presidente de OSE, Raúl Montero, se expresó respecto a este primer paso para lograr una mayor cobertura: “estamos cumpliendo un sueño”.
En diálogo con Comunicación Presidencial, explicó que el promedio de cobertura habrá aumentado entre 10 y 12% para 2027, una vez finalizadas las obras, en las que se invertirá más de 320 millones de dólares.
Por otra parte, el Proyecto Neptuno propone utilizar el Río de la Plata como fuente de agua para potabilización y abastecimiento del área metropolitana de Montevideo. Implica la construcción de una toma de agua bruta en la zona de playa Arazatí (departamento de San José) y una planta potabilizadora próxima a la toma de agua bruta.
También está planificado crear una reserva de agua dulce en las proximidades de esta última y una tubería aductora de agua tratada que atravesaría el Río Santa Lucía hasta el recalque de Melilla y desde allí hasta los tanques de Cuchilla Pereira (estos dos últimos del sistema de abastecimiento metropolitano, en el departamento de Montevideo).
Como parte de los componentes del proyecto se incluye la construcción de un sitio para la disposición final de los lodos deshidratados que se generan como consecuencia del proceso de potabilización (monorrelleno).
Es una obra que posibilita tener una fuente alternativa al Río Santa Lucía lo cual es estratégicamente importante, así como incrementar en un 30% la capacidad de producción y transporte de agua potable al sistema metropolitano que abastece a más de la mitad de la población del país.
Al respecto, el presidente de OSE sostuvo que el proyecto es “fundamental” para el país, y que, tras la experiencia de la histórica sequía del año pasado, quedó claro que Uruguay necesita una fuente alternativa de agua potable.
Actualmente, los equipos jurídicos de OSE, del Ministerio de Ambiente (MA) y del Ministerio de Salud Pública (MSP) se encuentran trabajando en la apelación al fallo del juez Alejandro Recarey. El magistrado ordenó a la empresa estatal no suscribir el contrato con el consorcio Aguas de Montevideo, al considerar que existen bases para “suponer” un proceso de privatización parcial en el futuro suministro del agua potable para la zona metropolitana.