Crítica: "La cabeza de la araña" tiene a Chris Hemsworth como científico loco y poco más

Compartir esta noticia
Cabeza de araña

EN EL STREAMING

Netflix estrenó una película de acción que pretende ser filosófica pero que cae por su propio peso; no está mal, pero podría ser mucho mejor.

En el centro hay un científico loco que prueba drogas con un grupo de presos. Así les aumenta la libido, la tristeza, el miedo o la violencia a través de una app en un Gran Hermano dirigido por el doctor Frankestein. Esa es, básicamente, la idea central de Cabeza de araña, la impensada colaboración entre Netflix y The New Yorker, la revista en la que se publicó el cuento corto de George Saunders que acá se adapta libremente.

En una decisión de casting algo exótica el científico loco es Chris Hemsworth, el actor también conocido como Thor. Su paciente estrella es interpretado por Miles Teller, aquel chiquilín que descubrimos en Whiplash y que está enTop Gun: Maverick,que comparte director, Joseph Kosinsky, con Cabeza de araña.

El planteo está bien presentado y la fotografía del chileno Claudio Miranda (Oscar por Life of Pi) y el diseño de producción de Jeremy Hindle (Top Gun Maverick) aportan un marco visual destacado. La película explora muchas posibilidades de la narrativa (desde el control farmacológico en la sociedad por parte de los laboratorios hasta el concepto de la libertad individual) pero en todas se queda corta.

Con un planteo similar, Claire Denis lograba muchísima más profundidad en High Life, su notable fantasía de ciencia ficción con Robert Pattison. Uno no puede evitar pensar qué habría podido hacer con algo así David Cronenberg, un obsesionado con las posibilidades del cuerpo y de la mente.

Pero Kosinsky no es ninguno de ellos y en el último cuarto deja de lado cualquier terreno interesante a explorar por una resolución más cercana al cine de acción que al de un estudio sobre algunas contradicciones moderna. No era necesario pero hubiera estado un poco mejor.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar