El Oscarcomo mejor actor principal cierre una temporada de alta exposición y elogios para Brendan Fraser, el ídolo del cine de acción de la década que encontró, en La ballena, un proyecto que lo devolvió al perfil alto de las celebridades.
"Empecé en este negocio hace 30 años, y las cosas no me resultaron fáciles", afirmó Fraser al borde las lágrimas al recibir la estatuilla por el esforzado papel de un obeso mórbido. "Gracias por este reconocimiento".
Sella así el regreso de Fraser, que fue una de las estrellas más taquillera de fines de la década de 1990 y comienzos de la de 2000, y que desapareció de la mirada pública.
El actor pausó su carrera en medio de una crisis personal y tras haber acusado a una figura de la industria de acoso sexual. En la decisión de retirarse jugó, también un papel especial la depresión y otra serie de problemas de salud.
Así, su ausencia en la pantalla se dio por siete años, pues tuvo que ser intervenido en varias ocasiones por lesiones en su cuerpo como traumatismos en sus rodillas, disco espinal y costillas, además de problemas en sus cuerdas vocales.
Estas lesiones causaron que Fraser se alejara de las pantallas y tuviera una crisis económica, perdiendo así su reconocimiento en Hollywood.
Fraser comentó en entrevistas que al divorciarse de la mamá de sus tres hijos se vio bastante afectado. Además, en 2018 alegó que durante un almuerzo en 2003 había sido agredido sexualmente por Philip Berk, lo cual le causó gran depresión.
El abuso lo afectó de tal manera que el actor admite que no recuerda en qué proyecto trabajó después de lo ocurrido. “Me culpaba a mí mismo y me sentía miserable, porque decía: ‘Esto no es nada, este tipo solo se acercó y tocó un poco'", indicó Brendan Fraser en una entrevista con la revista GQ
Sin embargo, el actor canadiense admitió más adelante que entró en una depresión fuerte que lo hizo dudar de sí mismo y de sus proyectos, por lo que todo, incluso él, pasó a un segundo plano.
De padres canadienses, Fraser nació el 3 de diciembre de 1968 en Indiana, centro de Estados Unidos. El teatro despertó su interés por la actuación desde muy joven, y después de graduarse en el Cornish College para las Artes, en Seattle, Fraser se instaló en Los Ángeles a comienzos de los años 1990.
La ciudad de oropel lo recibió con los brazos abiertos, y no demoró en aparecer en películas, entre ellas Hombre de California (1992), donde interpretó a un cavernícola descongelado por adolescentes.
El alto y carismático actor de ojos claros se convirtió en una figura constante en la pantalla grande, muchas veces con personajes que exploraban mundos desconocidos.
Arrancó lágrimas en Código de honor (1992), cosechó risas con George de la selva (1997), y sacudió la taquilla con el aventurero Rick O'Conell en La Momia (1999), que tuvo dos secuelas.
En 1998, Fraser se casó con la también actriz Afton Smith y tuvieron tres hijos.
Más tarde, protagonizó junto a Liz Hurley una nueva versión de Al diablo con el diablo (2000), y tres años después dirigió Looney Tunes: de nuevo en acción.
Fraser protagonizó más de 40 largometrajes, entre ellas Vidas cruzadas (2004), Óscar a la mejor película, hasta que desapareció de los afiches de Hollywood.