El País de Madrid
A lo largo de 100 años de historia, The Walt Disney Company se ha guardado las respuestas a algunas de sus grandes preguntas como, por ejemplo, si el cuerpo de Walt Disney está efectivamente congelado desde su muerte en 1966. Sin embargo, una de las grandes interrogantes fue formalmente aclarada: el castillo de Blancanieves fue inspirado en uno español.

Cuando se cumplen 100 años de la fundación de la multinacional del entretenimiento, Disney confirmó que el perfil del alcázar segoviano sirvió de inspiración a sus dibujantes en 1937 para diseñar el castillo en el que residía la malvada reina de Blancanieves y los siete enanitos y no el de La Bella Durmiente (1959), donde la princesa Aurora esperaba acostada el principesco beso, ni el de Cenicienta (1950), que tiene su origen en el de Neuschwanstein (Alemania).

Pero la compañía no solo dio a conocer que este monumento medieval español sirvió como inspiración al escenario de la icónica película, sino que descubrió otras 29 localizaciones de sus producciones más famosas. Los escenarios incluyen edificaciones históricas, parques, tiendas o restaurantes más o menos reconocibles en las películas y ubicados en 13 países del mundo. De los de la lista, ninguno está en América del Sur.

Entre las localizaciones que reveló la compañía se encuentran el laberinto de Great Fosters en Alicia en el País de las Maravillas (1951); los menhires prehistóricos escoceses de Calanais Standing Stones de Valiente (2012); la tienda de lujo londinensa Liberty (Cruela, 2021); Regent’s Park en 101 Dálmatas (1961), el Big Ben de la capital británica que sobrevuela Peter Pan (1953) o la catedral de San Pablo en Mary Poppins (1964), todas en Reino Unido.

Hay más: la isla Skellig Michael aparece en Star Wars: el despertar de la fuerza (2015), el pueblo escocés St. Abbs figura en Avengers: Endgame —es el lugar en donde está instalado y retirado el personaje de Thor— y la animada Winnie the Pooh, de 2011, arma su espacio en referencia a la región inglesa Ashdown Forest.

En Francia, El Jorobado de Notre Dame (1996) salta de gárgola en gárgola en la mítica catedral parisina del título; Ratatouille (2007) prepara espaguetis en el restaurante de Le Train Bleu, y se puede identificar a Mont Saint Michel en Enredados, el Château de Chambord en La bella y la bestia de 1991, y el Château de Saumur en La bella durmiente.

Mientras La Sirenita (1989) surca las aguas de Dubrovnik (Croacia) y El rey león (1994) ruge en la sabana Masai Mara (Kenia), Black Panther toma mucho de la reserva natural sudafricana Blyde River Canyon. Indy lucha contra los malos en Sicilia en Indiana Jones y el Dial del Destino (2023), al tiempo que Frozen (2013) no pasa frío a pesar de estar en la medieval fortaleza de Akershus, en Noruega.

¿Cuáles son las locaciones que completan la lista? Alemania, además del castillo de Cenicienta, aporta The Black Forest en Blancanieves y los siete enanitos (1937), Rothenburg ob der Tauber en la Pinocho original, y el aeropuerto de Liepzig/Halle en Capitán América: Civil War.

Black Widow tiene mucho rodado en Budapest, Hungría; mientras que Forte di Bard de Italia fue sede de Avengers: Era de Ultrón y la playa Reynisbara Black Sand Beach fue considerada para Rogue One: una historia de Star Wars.

Cinque Terre, también en Italia, tiene su lugar en la animación Luca; el Monte Olimpo está en Hércules, y el valle jordano Wadi Rum se puede ver en Aladdín.

Ahora solo falta que la compañía siga respondiendo más preguntas que continúan en el aire, como qué es Goofy o si Pluto es un perro, aunque ambos personajes no salgan nunca, en sus películas, de Estados Unidos.