FESTIVAL

En los últimos días dio inicio la nueva edición del Festival de cine de Venecia que volvió a reunir a destacados realizadores, las estrellas de cine y donde se presentarán las películas que seguramente integren la lista de la próxima temporada de premios.

Entre la destacada lista de títulos que forman parte de la sección oficial, se encuentra The Whale, lo nuevo del director Darren Aronofsky, que tiene como protagonista a un irreconocible Brendan Fraser. Y tras su proyección en el LIdo, el público recibió con entusiasmo la interpretación del actor.

Fue durante la noche del domingo que se estrenó The Whale, que en muchos aspectos marca el regreso de Fraser a un papel destacado luego de haber caído en una suerte de limbo cinematográfico. Luego de la proyección, los espectadores se mostraron muy convencidos por la actuación de Fraser, y se lo hicieron saber a través de una ovación que se prolongó a lo largo de siete minutos.

Para algunos especialistas, esta película puede ser el inicio del regreso del actor a los grandes proyectos. The Whale le exigió someterse a un gran cambio físico de cara un papel de gran complejidad. En la película, Fraser compone a Charlie, un solitario profesor de inglés que padece obesidad mórbida y decide luchar para volver a encontrarse con su hija Ellie, una adolescente de 17 años interpretada por Sadie Sink, quien saltó a la fama por la serie Stranger Things. El trío protagónico lo completa la reconocida Samantha Morton.

"Vas a ver algo que nunca antes viste", dijo el año pasado el actor en una entrevista. "Eso es realmente todo lo que puedo decirles. El guardarropa y el vestuario eran gigantes, sin costuras, engorrosos. Esto ciertamente está muy lejos de todo lo que he hecho, pero no quiero ser tímido... Sé que va a causar una impresión duradera", adelantaba, después la filmación.

Este regreso a las grandes ligas seguramente es festejado por partida doble por el actor, que en su momento aseguró que formaba parte de una lista negra. En 2017, Fraser se sumó a la ola de denuncias que conmocionaron a la industria del entretenimiento estadounidense y aseguró que Philip Berk, expresidente de la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA) -la entidad que entrega los premios Globo de Oro- abusó sexualmente de él y que el haber hecho pública la situación en su momento redundó en una clara falta de propuestas laborales.

Según contó a la revista GQ, el hecho ocurrió en el verano del 2003, en un almuerzo organizado por la HFPA en un hotel de Beverly Hills. En medio de una habitación llena de gente, Berk se acercó a él para saludarlo. "Extendió su mano izquierda y agarró una de mis nalgas, mientras que metió uno de sus dedos y comenzó a moverlo", relató. Berk, por su parte, ya había mencionado el episodio en su libro autobiográfico With Signs and Wonder, en el cual había relatado que le había pellizcado el trasero a modo de broma. Fraser, sin embargo, asegura que el hecho no fue gracioso, y que en ese momento se sintió abrumado por el miedo.

El actor aseguró que aquel incidente lo volvió más solitario y que luego de que ocurrió, decidió retirarse de la vida pública. Además, afirmó que la HFPA lo incluyó en una "lista negra" y que rara vez lo volvieron a invitar a los Globos de Oro. "El teléfono dejó de sonar y comencé a preguntarme por qué. Hay muchas razones, pero, ¿fue esta una de ellas? Yo creo que sí", manifestó.

Fue gracias a los movimientos #MeToo y Time's Up que Fraser se animó a contar su historia. "Conozco a Rose McGowan, a Ashley Judd y a Mira Sorvino. Trabajé con ellas. Las siento mis amigas. No he hablado con ellas en años, pero son mis amigas. Este movimiento es maravilloso, al igual que esta gente con el coraje de decir lo que yo no tuve el coraje de decir", dijo.