AUTOCINE

Grease es uno de los musicales más famosos y queridos de Hollywood y esta noche se podrá ver en un autocine (el del Aeropuerto de Carrasco a las 20.40), como si se estuviese en la misma película.

Protagonizada por Olivia Newton-John y John Travolta, es la historia de las amistades, los romances y las aventuras de un grupo de adolescentes de secundaria en la década de 1950. Y no importa las veces que se haya visto, nadie puede resistirse a una de las bandas sonoras más conocidas del cine, ni a la química entre sus protagonistas.

Sin dudas las nuevas generaciones conocen parte de esta historia a través de la saga High School Musical. Pero Grease ya mostraba la historia del chico popular que durante las vacaciones conoce a la chica perfecta, quien al año siguiente termina en la misma secundaria y se enamoran.

Claro que Grease tiene una vuelta de tuerca: él es un chico malo que viste de cuero, fuma, se tapa el pelo de gomina y pertenece a los T-Bird, una pandilla local, mientras que ella es una chica buena que se viste acorde con camisa blanca, saquito y pollera amarilla. Y luego de varios desencuentros e intentos por cambiar su forma de ser (él se vuelve un deportista que viste uniforme de la universidad y ella aparece vestida de cuero y con el pelo batido), descubrirán que solo tienen que ser ellos mismos.

Eso queda demostrado en la canción final la más conocida de la película: “You’re The One That I Want” (un infaltable en cualquier fiesta o en La noche de la nostalgia) donde ellos deciden quedarse en el punto intermedio. La “Sandy mala”, igual, es una de las grandes transformaciones del cine.

Pese a su trama -que se permite hablar de virginidad y embarazo adolescente-, las canciones son el punto más fuerte de esta comedia musical que se basa en el espectáculo de Broadway estrenado en 1971 y fue escrito por Jim Jacobs y Warren Casey.

La versión cinematográfica, que en Uruguay se estrenó en la Navidad de 1978, fue dirigida por Randal Kleiser y escrita por Bronte Woodard.

Tanto Travolta como Newton-John eran desconocidos cuando aceptaron hacer la película (cuando Travolta firmó para hacer Fiebre de sábado por la noche también se comprometió para Grease) y sus carreras cambiarían gracias a esta película. Y mientras Carrie Fisher, Marie Osmond y Susan Dey fueron consideradas para el papel de Sandy, Henry Winkler, uno de los actores más exitosos de aquel momento, por la serie Happy Days rechazó papel ya que se parecía mucho a The Fonz, su personaje en la serie.

Fue la película más taquillera de su año e impulsó la carrera de sus protagonistas, además de alentar cientos de fiestas de fin de año. Y esta noche, Sandy y Danny volverán a cantar, bailar y enamorarse en un autocine.