Ke Huy Quan ganó este domingo el Óscar al mejor actor de reparto por Todo en todas partes al mismo tiempo (en cines y en Prime Video) y cerró así la temporada más especial de una carrera marcada por las adversidades.
La historia de vida del actor vietnamita es una de las más emotivas de estos Premios Oscar. Huyó de su país de niño, con parte de su familia, y fue a parar a un campo de refugiados de Hong Kong y posteriormente llegó como asilado político a Estados Unidos, donde se instalaron todos.
Se introdujo en la actuación casi de casualidad. Fue Tapón en Indiana Jones y el templo de la perdición, y posteriormente Data en Los Goonies, ambas con participación de Steven Spielberg (director de la primera, productor de la segunda). Pero su carrera daría un vuelco.
Frustrado por la discriminación sistemática que comenzó a sufrir a medida que creció, y cansado de que la industria solo le ofreciera papeles basados en estereotipos asiáticos, decidió hacer a un lado su sueño de actor.
Se dedicó a trabajar en la industria, pero detrás de cámaras, como ayudante de dirección o coreógrafo de peleas. Hasta que una película le devolvió la esperanza: fue la comedia Locamente millonarios (2018), que le demostró que algo estaba cambiando. Entonces decidió volver.
Su regreso a la actuación fue justamente con Todo en todas partes al mismo tiempo, que coronó ese camino de adversidades con un premio Oscar a mejor actor de reparto. Lo anunció Adriana DeBose, que se quebró al leer su nombre, y él lo recibió entre lágrimas.
“Mom — I just won an Oscar!”
— ABC News (@ABC) March 13, 2023
Ke Huy Quan gives an emotional speech after winning Best Supporting Actor for his role in “Everything Everywhere All At Once.” #Oscars #Oscars95https://t.co/OizA2V1EIT pic.twitter.com/emnfTY7Cmi
"Mamá, ¡acabó de ganar un Óscar!", dijo ante una ovación de pie en el Teatro Dolby en Hollywood. Ofreció un discurso eufórico y conmovedor que cerró hablando de la importancia de soñar. "Los sueños son algo en lo que hay que creer. Yo casi renuncio al mío", dijo y emocionó.