CRÍTICAS

Hay películas que generan polémica, y Blonde, la de Netflix con la actriz cubana Ana de Armas como Marilyn Monroe, parece sumarse a esa lista.

Blonde no es una biopic, sino que está inspirada en la novela de ficción del mismo nombre de la escritora Joyce Carol Oates, quien le dedicó un libro a Marilyn en el año 2000. La novela, como la película, muestra un costado poco feliz de la estrella de cine, marcada por el abandono de su padre, y a Hollywood como un lugar de pesadilla, al que llegan jóvenes aspirantes a convertirse en celebridades para descubrir una realidad muy distinta.

El largometraje fue estrenado en el Festival de Cine de Venecia y también se proyectó en el de San Sebastián. Llegó la semana pasada a la plataforma de streaming y, tras su arribo, comenzaron las críticas.

En Blonde, Monroe queda embarazada y es llevada a abortar un feto que más tarde comienza a hablarle. "No me harás daño esta vez, ¿verdad?", le pregunta. "No eres el mismo bebé", susurra Monroe a su vientre, y el feto responde: "Ese fui yo. Siempre soy yo".

El embrión, al que ella llama "Baby", se ha convertido en tema de conversación entre críticos especializados y en redes sociales.

Los críticos lo han llamado "tonto", "despreciable" y "cruel". Algunos incluso lo han catalogado como "inadvertidamente propagandístico", en el entendido de que es un "truco familiar" contra el aborto.

Abandonada por su padre y abusada por su madre en la infancia, Monroe se hizo mundialmente famosa como un objeto sexual infantilizado que llama a todos sus amantes "papá". En Blonde, su feto tiene la voz de la actriz infantil Lily Fisher que interpreta a Monroe cuando era niña, cuando aún era Norma Jean. Así, cuando Monroe se comunica con su feto, está de alguna manera hablando, con lástima y aversión, consigo misma.

Lo que algunos críticos han señalado sobre esto es la manera en que se muestra. Al exhibir el feto, el director Andrew Dominik hizo un intento "tediosamente literal" de representar la vida interior de Monroe.

También se ha señalado la manera en la que se muestra la violación de Monroe por un productor llamado Sr. Z (David Warshofsky) como parte de un proceso de casting. Son escenas destinadas a mostrar cómo la violencia sexual puede robarle la personalidad a alguien. Ese abuso, como otros que se presentan, también recibió críticas de expertos e internautas.

La crítica de cine de The New York Times, Manhola Dargis, afirma que esta adaptación ignora el talento "fuera de lo común" de Monroe, y que su voz queda eclipsada por centrarse en su físico.

"Teniendo en cuenta todas las humillaciones y horrores que sufrió Marilyn Monroe durante sus 36 años de vida, tragedias familiares, ausencia paterna, abuso materno, orfanatos y casas de acogida, episodios de pobreza, papeles indignos en películas, insultos sobre su inteligencia, luchas contra la enfermedad mental, problemas con el abuso de sustancias, agresiones sexuales y la atención de babosos y fanáticos insaciables, es un alivio que encima no haya tenido que sufrir las vulgaridades de Blonde, el último entretenimiento necrofílico hecho para explotarla", escribió.

En las redes sociales, los comentarios también se han centrado los diálogos que mantiene Monroe con sus fetos, así como en la forma en la que se muestra una vida llena de abusos en vez de presentar una historia sobre una mujer que fue víctima de un sistema explotador y misógino.

"¿Es Blonde la película más misógina del año? En los tiempos del #MeToo podrían haber aprovechado para contarnos la historia de una superviviente que soportó el machismo y los abusos de la industria, se enfrentó a la todopoderosa 20th Century Fox y montó su propia productora", escribió una internauta.

"Nunca había visto una película que trate PEOR a una mujer como Blonde con Marilyn como estúpida, emocional, incapaz, desequilibrada, sexualizada, frágil y sin talento. Debería darle verguenza a Netflix que es 'feminista' por sacar todo lo degenerado, olvidándola como ARTISTA", escribió otro usuario en Twitter.

El propio Andrew Dominik tampoco se ha mostrado muy respetuoso con Marilyn al defender su película. En una entrevista para la revista del British Film Institute, Sight &Sound, el director aseguró que ya nadie ve las películas de Marilyn o que Los caballeros las prefieren rubias, la célebre comedia de Howard Hawks, solo trata de unas "putas bien vestidas".

Para Dominik, Blonde está destinada a reparar el daño de ese estereotipo para devolverle "su significado" a Monroe. Y sobre las críticas a la falta de sutileza de su película en el retrato de los múltiples abortos que sufrió la actriz, dijo: "Tener tacto no me interesa".