ESTRENO

Luego de unos inevitable meses de retraso y en el único complejos de salas del circuito comercial que está abierto, hoy se estrena en Uruguay, Mujer Maravilla 1984, la película más importante en llegar a cines locales desde Tenet. En Estados Unidos se estrenó en diciembre pero, por la plataforma HBOMax.

Por eso, y con las facilidades que da ese invento llamado Zoom, El País participó en una conferencia con la directora de la película, Patty Jenkins y los protagonistas Gal Gadot, Kristen Wiig y Pedro Pascal. Allí se contaron detalles de esta esperada continuación de las aventuras de la superhéroe de la editorial DC.

Acompañada por su inconfundible ronquera, Gadot (que el lunes confirmó su tercer embarazo) aparece en la pantalla luciendo una chaqueta gris y azul y su enorme sonrisa. En el fondo se ve el colorido logo de esta nueva entrega de la princesa amazona, Diana de Temiscira, más conocida como, aunque en las películas nunca se la menciona así, como Mujer Maravilla. Ese fondo impersonal enmarca al resto de los anfitriones, todos vestidos elegantes, como si estuvieran en una alfombra roja. Es lo más cerca que se puede estar, en tiempos como estos, del glamour de las grandes estrellas de cine.

En la media hora que duró la conferencia, los actores bromearon entre ellos sobre las dificultades de filmar las complejas escenas de acción, alabaron la visión de Jenkins quien también escribió el guion (junto a Geoff Johns y Dave Callaham), y contaron cómo fue volver al universo de la única mujer de la Liga de la Justicia.

“Soy israelí, así que mi inglés es malo”, dijo entre risas Gadot, cuando la moderadora de la charla se excusa por haber pronunciado mal una palabra. Esas risas continúan a lo largo de la conferencia, y no importaba si hablaba Wiig, quien interpreta a la villana Cheetah, o el chileno Pascal, otro de los villanos de esta nueva entrega, Maxwell Lord, la conferencia demostró un montón de profesional camaradería.

Jenkins dijo que comenzó a armar el bosquejo de esta secuela mientras terminaba de filmar la primera parte, que se estrenó en 2017 y se convirtió en una de las películas más taquilleras de ese año. “Al final de la primera película está Mujer Maravilla sola y pensé que se podía hacer algo con lo que pasaba después, qué haría para salvar al mundo, y así fue como comenzó el borrador”, dijo.

"Discutimos mucho sobre el origen de Diana, su historia y cómo su vida ha cambiado desde la última vez que la vimos", agregó Gadot. "En 1984 perdió a sus compañeros, se siente sola y no quiere comprometerse ni hacer nuevos amigos porque se darán cuenta que ella no envejece y ellos sí van a morir", dijo.

Ese recelo por su personaje se debe a que a Gadot, Mujer Maravilla le cambió la vida y la convirtió en una estrella de cine. Cuando vio la primera película pensó que estaba lista para ver todo lo que habían hecho en el set. "Pero al ver la secuencia inicial, tuve una reacción que no esperaba", dijo la actriz. "Me emocioné tanto y por primera vez no me sentí como Gal la actriz, o Gal la modelo, sino Gal con ocho años viendo a otra chica de ocho años haciendo cosas increíbles. Me emocioné, y ese es el poder de las películas. Soy una creyente que cuando ves algo, crees que puedes lograrlo y te conviertes en eso. Es tan poderosa y fuerte que me encantó ser parte de esto. Nunca había visto algo así antes. Además, las chicas crecen pensando que pueden ser como ella".

Kristen Wiig, quien interpreta a Cheetah, que empieza como amiga y pasa a ser rival dijo que no querían mostrar a la típica chica con problemas que termina siendo la villana. "Queríamos mostrar qué hace que ella sea tan solitaria, invisible y qué es lo que realmente quiere. A medida que atraviesa las distintas etapas, el vestuario y maquillaje realmente ayudaron para lograr entender quién es ella". También dijo que nunca había hecho un personaje así en su carrera y que Pedro Pascal puede ser muy aterrador como Maxwell Lord. "Fue una experiencia aterradora y divertida para mí", agregó Wiig.

La escena final, el duelo entre Mujer Maravilla y Cheetah fue muy compleja de hacer, dijo Gadot. "Todo en esta película fue mucho, el vestuario, los escenarios, las coreografías de pelea, todo fue laborioso, pero al final del día, cuando la ves te das cuenta que funciona", dijo Gadot. "Patty tenía razón en usar lo mínimo de CGI, así que la mayor parte de las cosas que van a ver es gente real haciéndolas. Son personas reales, ya seamos nosotros o el equipo de dobles de acción, y son cosas que ya no se hacen. Fue la película más difícil que hice, pero valió la pena. En especial porque la primera película fue recibida de tan buena manera, que no había forma que tomáramos atajos para dar todo lo que podíamos".

Jenkins agregó que se creó un estudio imponente para hacer la batalla final. "Quería que se sintiera que el escenario fuera muy grande, y el Cirque du Soleil ensayaba y nos mostraba lo que se podía hacer. Fue increíble y con Gal hablamos de esa escena desde el inicio, cómo pelearían. No es golpearse en la cara, las dos quieren controlar a la otra, aunque Cheetah tiene malas intenciones".