Michelle Yeoh hizo historia al convertirse en la primera mujer asiática en ganar un Premio Oscar a mejor actriz. Lo logró en su primera nominación, por su protagónico en Todo en todas partes al mismo tiempo, al final ganadora de la estatuilla de mejor película.
"Para todos los niños y niñas pequeños que se parecen a mí y están viéndome esta noche. Este es un faro de esperanza y posibilidades", apuntó la actriz malaya de origen chino al recibir el premio. Esta es la prueba, añadió, "de que los sueños grandes se hacen realidad".
Yeoh era una de las favoritas de esta 95° edición, junto con la australiana Cate Blanchett, por Tár. La Academia de Hollywood decidió finalmente seguir la tendencia de los últimos años y apostar por la diversidad.
Yeoh se impuso a Blanchett y a Ana de Armas (Rubia), Andrea Riseborough (To Leslie) y Michelle Williams (Los Fabelman).
El premio le llega unos días después de que el Sindicato de Actores le reconociera también como la mejor actriz de un año en el que también ganó el Globo de Oro a la mejor interpretación de comedia o musical.
En la historia creada por Daniel Kwan y Daniel Scheinert, Yeoh interpreta a Evelyn Wang, una inmigrante en Estados Unidos sobrecargada de trabajo y tareas familiares que debe salvar el mundo dando saltos entre universos paralelos, al ritmo de patadas de kung fu.
La actriz se ha dedicado en entrevistas y discursos a hacer un alegato por la diversidad racial en el cine y por los papeles para las actrices de mediana edad, narrando los obstáculos a los que ha tenido que hacer frente para abrirse paso.
A sus 53 años y con más de cuatro décadas de prolífica carrera en su haber, Yeoh fue elegida en 2022 como icono del año por la revista Time.
La malaya fue chica Bond en El mañana nunca muere en 1997, y su papel más exitoso hasta la fecha fue el de coprotagonista de la oscarizada película de Ang Lee El tigre y el dragón (2000).
Había protagonizado, en los últimos días, una polémica en la que se interpretó que atacaba a su competidora Blanchett y, por tanto, iba contra las reglas de la Academia, pero al final nada de eso interfirió en esta conquista.
Con base en EFE