En Aquí se concentran la fortaleza y la debilidad de Robert Zemeckis: el gusto por la experimentación tecnológica y el sentimentalismo.
Es la reunión de Zemeckis con los compinches de su película más oscarizada, Forrest Gump: acá están sus estrellas (Tom Hanks y Robin Wright), su guionista (Eric Roth) y su compositor Alan Silvestri. Era un película que apelaba a la emoción y el uso de la tecnología, esa marca de agua del cine de Zemeckis. Allá era colocar a Forrest Gump en el mismo recinto que John Fitzgerald Kennedy, un recurso que fue, en su momento, tan increíblemente milagroso y moderno.
Esa curiosidad y la posibilidad de financiarla está detrás de convertir a Hanks en una animación en El expreso polar, hacer las cosas que hacía con los cuerpos de Meryl Streep y Goldie Hawn en La muerte le sienta bien o el uso de la tan mentada Inteligencia Artificial justamente en Aquí.
Recurre a ella, en su variante deep fake (o sea cambiar el rostro), para rejuvenecer a Hanks y Wright que interpretan a un matrimonio a lo largo de 70 años de su vida. Durante el rodaje, la empresa de inteligencia artificial Metaphysic (que salieron cuartos en la edición de 2002 de America’s Got Talent en 2022 con una versión deep fake en tiempo real de Elvis) consiguió hacerlo en el propio set de filmación, o sea frente a la cámara captando los mismos movimientos de los actores y rejuveniciéndolos digitalmente al mismo tiempo.
Eso permitió a la producción prescindir de tiempo y costo de maquillaje y o meses de efectos visuales en la posproducción. Se supone, además, que abarató costos.
Suena mejor de lo que se ve y la apariencia juvenil de las estrellas se siente demasiado artificial, demasiado cerca de la apariencia de El expreso polar que ha quedado 20 años de tecnología atrás. Eso puede provocar un distanciamiento emocional para una película que necesita de una platea conmovida. Igual lo consigue.
Aquí está basada en una novela gráfica de Richard McGuire de quien toma la historia y también la forma. Está filmada con una cámara fija en el living de una casa, en un pedazo de la Tierra que fue abrevadero de dinosaurios, paseo de nativos americanos, campo de batalla de la Guerra Civil, lo recorrió de Benjamin Franklin y, principalmente, la casa de varias familia a comienzos, mediados y finales del siglo XX y tiempos más recientes. Todo eso retratado, se insiste, desde el mismo ángulo y la misma posición de cámara.
Es un forma experimental de narrar y los tiempos simultáneos conviven a través de viñetas que intervienen la imagen, un recurso que estaba en el comic original, del cual es una adaptación muy fiel. El fuera de cuadro será revelado al final
A pesar del lapso que abarca la película (unos tres millones años en un solo rincón del mundo desde el Pleistoceno a la reciente pandemia), principalmente se concentra en la pareja de Richard (Hanks) y Margaret (Wright).
Se conocieron en la década de 1960 y en el living de la casa de él, que es donde se concentra la acción. Allí conviven con el padre de Richard (Paul Bettany), un veterano de guerra de malhumor, sordera y con muchos tragos encima y una madre (Kelly Reilly) de aceptación silenciosa.
Margaret quiere irse de ahí, pero los temores financieros de Richard y la familia que se hizo grande, la dejan en ese living donde pasa toda su vida. El presente de la película es una pareja de afroestadounidenses, un comentario sobre cómo han cambiado los tiempos.
En su arco narrativo, Aquí es una oda a las frustraciones de la generación de los baby boomers, las cosas que debieron dejar y cómo, en definitiva, todos terminando pasando por lo mismo. Richard abandona sus sueños de ser artista para proveer a su familia, Margaret postergó sus propias ilusiones como lo deja claro en el sentimentalote monólogo de su fiesta de 50.
La idea es que la vida está llena de esos pequeños momentos y que nuestro presente se asienta sobre otras tantas vidas que pasaron, soñaron y murieron allí. Los flashbacks, la simultaneidad de los distintos tiempos y un grupo de arqueólogos apoyan esa idea.
Al final, y después de tantos arrebatos tecnológicos, Zemeckis apreta el botón del sentimentalismo, con un final de esos que conmueve y que la música de Silvestri, el único movimiento de cámara y los rostros envejecidos de sus estrellas ayudan a los más cercano que se puede estar del golpe bajo.
Pero Aquí funciona aún en su sensiblería y esos efectos que se verán raros, sí, pero que son una apuesta a la magia del cine.
Aquí [* * * *]
Estados Unidos, 2024. Título original: Here. Director: Robert Zemeckis. Guion: Eric Roth y Robert Zemeckis basado en una novela gráfica de Richard McGuire. Fotografía: Don Burgess. Editor: Jesse Goldsmith. Música: Alan Silvestri. Con: Tom Hanks, Robin Wright, Paul Bettany, Kelly Reilly. Duración: 104 minutos. Estreno: 9 de enero, en cines.