ESTOCOLMO | El hermano del autor sueco Stieg Larsson negó que su familia esté intentando exprimir hasta el último centavo de la fama póstuma del escritor, tal y como aseguró la compañera de Larsson.
Durante un programa televisivo que se emitirá en la televisión sueca, Joakim Larsson dijo que tanto él como su padre, que heredaron el patrimonio del autor, planean donar a instituciones benéficas la mayor parte de los 38 millones de dólares (250 millones de coronas) que han ganado hasta ahora debido al éxito de los libros del escritor. "¿Cuanto nos quedamos nosotros? Ni nos lo hemos planteado``, dijo.
La compañera de Larsson durante tres décadas, Eva Gabrielsson, quiere el control sobre las obras del autor y acusa a la familia de comercializar su legado para beneficiarse económicamente. Gabrielsson no heredó nada porque la pareja nunca se casó y Larsson no dejó un testamento cuando murió de un ataque al corazón en el 2004.
La trilogía del escritor (Los hombres que no amaban a las mujeres, La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina y La reina en el palacio de las corrientes de aire) fue inmensamente popular después de la muerte de éste, con unas 50 millones de copias vendidas alrededor del mundo. Gabrielsson tiene un cuarto manuscrito de la serie que no ha sido publicado, pero no goza de sus derechos de publicación. Se niega a entregárselo a la familia de Larsson. "Ya tienen mucho dinero. Creo que ha de haber algún límite en algún momento``, dijo en el mismo programa de televisión la semana pasada.
Joakim Larsson negó que su familia esté explotando el legado de su hermano a cambio de dinero. "Hemos pagado a nuestros abogados para que se frene eso. Incluso hemos recibido la oferta de hacer una opereta desde Taiwán y hemos dicho que no a eso``. AP