El pasado viernes falleció en el hospital Salpêtrière de París, a los 75 años, el actor y director de teatro y cine francés Laurent Terzieff. La causa fueron "complicaciones pulmonares", según informó a la prensa su agente, Alain Ichoux.
Había nacido como Laurent Tchemerzine en Toulouse, Francia, el 27 de junio de 1935, hijo de una madre ceramista y de un padre escultor de origen ruso. Quedó deslumbrado por el teatro cuando vio en su adolescencia La sonata de los espectros de Strindberg, dirigida por Roger Blin, que se convertiría en su mentor.
Llegó al cine con 23 años, en el drama juvenil Los tramposos (1958) de Marcel Carné, quien supo aprovechar su perfil romántico y su mirada transparente. Más tarde actuó al servicio de cineastas de primera línea como Mauro Bolognini (La noche brava, 1959), Gillo Pontecorvo (Kapó, 1960), Claude Autant-Lara (El bosque de los amantes, 1960; No matarás, 1961), Roberto Rossellini (Conspiración de traidores, 1961), Luis Buñuel (La vía láctea, 1968), Henri-Georges Clouzot (La prisionera, 1968), Pier Paolo Pasolini (Medea, 1969).
En 1961 fundó la compañía teatral que lleva su nombre, y que solía actuar en pequeños escenarios privados. A través de ella dio a conocer textos de Andreiev, Mrozek, Milosz y los anglosajones James Saunders, Murray Schisgal y Edward Albee. También montó numerosos espectáculos de poesía sobre la obra de Rilke, Brecht, Milosz y varios otros de sus autores favoritos.
Y continuó trabajando hasta el final: estaba rodando The Burma conspiracy, con Sharon Stone.