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America Rockstars 2023: así se vivió la fiesta juvenil entre la cumbia, el debut de Milo J y el brillo de Lali

El festival de música inauguró este sábado su tercera edición, en la Rambla del Golf y con una jornada llena de entrevistas y recitales, con Lali como número central. Así se vivió el primer día.

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Lali en el festival America Rockstars 2023.
Foto: Juan Manuel Ramos

A lo lejos se escucha a The La Planta cantar “Universo paralelo”. Una hilera de gente baja por Bulevar Artigas hacia la Rambla del Club de Golf mientras esquiva a los carritos de comida que toman la mitad de la vereda. Es una cuadra —de las largas— y hay de todo: chorizos, panchos, hamburguesas y hasta tequeños. A media que uno se acerca al predio donde se celebra la primera jornada del festival America Rockstars, se van amontonando los vendedores callejeros. Hay gorros de Tiago PZK, uno de los números de este domingo, pero la protagonista es Lali: además de los gorros, hay vinchas, pegotines, remeras.

“Las manitos para arriba, ¿dónde están?”, dice Nicolás Choca antes de arrancar con el estribillo de “Qué calor” de la banda argentina Supermerk2, un título que calza perfecto con esta tarde soleada. El cantante va de una punta a la otra del escenario mientras señala con el micrófono a la gente para que se anime a cantar. El set roza los 40 minutos y tiene temas como “Te mentiría”, “Ojitos chiquititos”, “Con la misma canción” y “Hoy te vas”. Incluso hay espacio para una versión de “Lo mejor del amor”. Sobre el final amaga con irse, entonces alguien de su equipo empieza un vivo de Instagram y The La Planta empieza a cantar “Salimo' en caravana”, dedicada a El Noba (“Donde quiera que estés”, dice antes del estribillo).

A unos 100 metros, en el Inspire Stage, Santiago del Moro entrevista a Nacho y La Tora de Gran Hermano. Están sentados en sillones blancos y, por momentos, el show de The La Planta dificulta el diálogo. Un centenar de personas, varias sentadas en el pasto, dejan de lado la cumbia para atender los detalles de la próxima edición del reality. El conductor revela, por ejemplo, que Julieta Poggio va a recibir a los integrantes de este año para llevarlos a la casa y que va a haber una participante uruguaya; La Tora dice que, si se pudiera, se anotaría para volver a la casa y que entraría con una camiseta que mezclara las banderas de Argentina y Uruguay. El público, claro, celebra el comentario.

Un rato después, del Moro —encargado de todas las entrevistas del festival— deja su puesto para ser entrevistado por Ignacio González. Habla del inicio de su carrera, cuenta lo que insistió para entrar a Much Music —su primera experiencia en televisión—, dice lo importante que es tener redes para mostrar habilidades e insiste con la importancia de estar convencido de lo que uno quiere. Sobre el final de la nota que se filma y se emite en streaming, del Moro mira al público y asegura que lo importante es abrazar la constancia, estar enfocado y no perder nunca el objetivo. Dice que cada vez que se despierta a las 5.00 y le cuesta dejar la cama, piensa en aquel niño de 10 años que soñaba con trabajar en radio y televisión. Mientras lo relata hace una pausa para no quebrarse. La gente lo aplaude.

Minutos después de las 19.00, el dúo MYA sale al escenario principal junto a un equipo de bailarinas. “La última vez que vinimos nos llevamos una energía hermosa”, comenta Maxi Espíndola al arranque del show. “¡Miren qué día hermoso nos tocó!”. Junto a su compañero, Agustín Bernasconi, ofrecen un concierto con coreografías, visuales y los hits necesarios para hacer cantar al público, que va creciendo a media que cae el sol. Cantan reggaetón con “BB”, “2:50 (remix”), hacen cuarteto con “Corazón guerrero” y hasta le dan espacio al reggaetón con “Qué pasará”. También se toman un tiempo para la balada con “Nunca soltamos”, que grabaron con Abel Pintos y muestra al cantante en la pantalla gigante. Es el concierto perfecto para un festival de este tipo. “¡El año que viene volvemos con nuestro show!”, anuncian y se llevan un aplauso.

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Público en el festival America Rockstars 2023.
Foto: Juan Manuel Ramos

Antes de los principales shows de la noche, America Rockstars es una procesión de juventud, atuendos aesthetic (es decir, que se ocupan especialmente de agradar a la vista), selfies y vasos de cerveza que se recargan en los puntos dispuestos por un predio que, este año, está lejos de llenarse. Los puestos de comida se llenan, los cuerpos se tumban en el pasto y, en el campo delantero, lo que sigue se espera a puro baile. Una de las marcas que apoya el evento provee pulseras luminosas que acompañan la selección de canciones bailables: de a ratos, el festival es más bien un boliche adolescente de balneario.

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Público en el festival de America Rockstars 2023.
Foto: Juan Manuel Ramos

Casi media hora más tarde de lo previsto —los cambios de horario, así como los cambios de grilla, son una constante en la edición 2023, que al final no cuenta con FMK y El Zar, entre otras modificaciones—, Milo J irrumpe en un escenario despojado y canta un set que agitan, sobre todo, los más chicos. Tiene 16 años y le canta con profundidad a su generación, pero llega a un público más amplio. Su fraseo lánguido dispara rimas románticas e introspectivas y Milo, a veces acompañado de sus músicos pero en muchos momentos solo, le declara su amor a Uruguay al tiempo que reclama agite, gritos, saltos. Por alguna molestia que puede haber causado su aparición con una camiseta de Nacional luego de su actuación con Agarrate Catalina y Bizarrap en los Latin Grammy, aclara que también "banca" a Peñarol. Después regala una versión acústica de "Barro tal vez" de Luis Alberto Spinetta mientras toma mate y una bandera argentina flamea en la pantalla gigante.

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Milo J en el festival America Rockstars.
Foto: Juan Manuel Ramos.

Entonces todo está listo para el plato fuerte del sábado y del festival todo, que es la vuelta de Lali a Montevideo. A pocos meses de su comentada actuación en el festival Acá Estamos, la argentina despliega —esta vez sin banda, con limitados cambios de vestuario pero con su contundente cuerpo de baile— un show enérgico, sensual, pop. Lo renueva con las canciones de su disco Lali, lanzado este año, y todo es acogido con el mismo frenesí: desde clásicos como "Ego" o "Soy" a novedades como "¿Quiénes son?" u "Obsesión", todo se grita con la misma intensidad, con el mismo fervor.

La noche guarda momentos especiales. Por un lado, Lali cierra en este concierto un año de giras que la llevó por todos lados y la convirtió en la primera artista femenina argentina en agotar entradas en el estadio de Vélez Sarsfield; está emocionada y por eso se atreve a hablar de los sueños, de que nadie nos silencie, de que hay que luchar por lo que uno quiere. Por otro, protagoniza en vivo un reencuentro con Cris Morena, piedra fundamental de su carrera y que ha seguido el show de cerca con todo el elenco de Margarita, la serie que filma en Uruguay. Para los miles que presencian esa situación, es un abrazo directo a la infancia, la adolescencia, la vida.

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Lali en el festival America Rockstars.
Foto: Juan Manuel Ramos

Lali cierra con "Boomerang" una presentación a puro baile y salto y, cuando se apagan sus canciones, la procesión empieza de vuelta hacia las salidas, aunque America Rockstars sigue con un after party y una DJ reclama al público que no se vaya, que se quede un rato más. Algunos le hacen caso. Otros abandonan el predio, listos para volver el domingo, a escuchar a Coti y Abel Pintos y Tiago PZK, mientras un corpulento vendedor oferta las remeras de Lali que todavía le quedan a disposición. Son blancas, con las cuatro letras de Lali brillantes en el pecho: las deja a 200 pesos, dice que menos le da vergüenza.

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