SONIDOS QUE ANDAN EN LA VUELTA

Con “El día que me quieras”, Ricardo Montaner se reencontró con su primer amor musical. Su versión del máximo himno de Alfredo Le Pera y Carlos Gardel es el primer adelanto de Tango, su próximo trabajo discográfico, que aún no tiene fecha de publicación pero que servirá para cumplir la promesa que le hizo a su padre y a su abuelo décadas atrás, cuando todavía vivía en el barrio bonarense Valentín Alsina, donde nació hace 64 años.

Acompañado de delicados arreglos de cuerdas, piano y bandoneón, Montaner le impone su sello a una de las letras más románticas del repertorio tanguero. A través del buen manejo de los matices y de la emoción que le imprime a su interpretación, logró adueñarse de un clásico. El videoclip fue filmado en el icónico Café De Los Angelitos, el bar bonaerense que Gardel visitaba asiduamente y donde estableció la mesa de su “barra” en 1912.

Después de haberse ganado a la crítica especializada con Fine Line (2019), el disco que incluyó los éxitos mundiales “Watermelon Sugar” y “Adore You”, Harry Styles está de regreso con “As It Was”, el primer adelanto de Harry’s House, el disco que lanzará el 20 de mayo. Y lo del nuevo ex One Direction ya es un éxito sin precedentes: rompió el récord al mejor debut de un artista masculino en Spotify gracias a sus 16 millones de reproducciones en solo 24 horas. 

La canción, que se construye sobre un riff de sintetizador al estilo de “Take On Me” de A-ha, recupera las vibras del synth-pop ochentero y lo revitaliza de la mano de un beat uptempo, un enriquecedor coro de susurros sobregrabados por el propio Styles y una letra melancólica y confesional. Es un adelanto prometedor de lo que se viene.

Luego de tres años sin publicar canciones a raíz de una extensa batalla legal con sus exproductores, Paulo Londra celebró su vuelta a la escena musical. Y lo hizo de la mano de “Plan A”, una canción que sorprendió a todos sus fanáticos. En vez de retomar el trap y el reggaetón que lo catapultó a la fama de la mano de “Adán y Eva” y “Tal vez”, el argentino prefirió apostar por un cambio sonoro.

Por eso, grabó una canción repleta de elementos rockeros —insistentes power-chords de guitarra, una batería furiosa y coros a lo punk-pop— que le permitieron reimaginar su propuesta. Lo que aún no cambió es el enfoque de sus letras: como ya quedó claro con Homerun, Londra parece sentirse más cómodo cuando se ubica en el rol del amante perdedor. Eso sí, no deja de ser un buen regreso.