Calvario
La cantante, ganadora de American Idol en 2002, reveló lo que vivió bajo la presión de la productora en sus comienzos.
Ganadora de la primera edición de American Idol, en 2002, Kelly Clarkson ni se imaginaba lo que le tocaría vivir en los años posteriores. Hoy, a los 35 años, reveló que la compañía discográfica la presionaba tanto con la idea de que bajara de peso para encajar en los estándares de belleza que llegó a perder las ganas de vivir. "Cuando estaba muy delgada, quería suicidarme", confesó en una entrevista a la revista Attitude.
"Estuve increíblemente triste, por dentro y por fuera, durante cuatro años de mi vida. Pero a nadie le importaba porque estéticamente encajaba", explicó.
Kelly había sufrido un desorden alimenticio en su adolescencia, y durante esos cuatro primeros años de su carrera llegó a padecer problemas físicos, debido a la excesiva rutina de ejercicios que la obligaban a seguir. "Pensaba que la única solución era renunciar. Tenía las rodillas y los pies destrozados porque lo único que hacía era correr: me ponía mis auriculares y empezaba a correr. Estaba en el gimnasio todo el tiempo", recordó.
La pesadilla terminó cuando decidió desvincularse de aquel sello discográfico. "Estaba rodeada de algunas personas muy negativas, y me alejé de todo eso porque también contaba con el apoyo de otras maravillosas. Al final lo que tuve que hacer fue enfrentarme a ellos y optar por caminar hacia la luz", afirmó.