Empezaron en 2016 haciendo covers de cumbia villera con la intención de reunir a la gente, bailar y disfrutar. Con este mismo propósito, en 2019 crearon El Club de La Cumbia, que se volvió el after office más grande de Montevideo y en el que una vez al mes, en Sala del Museo (Rambla y Maciel), tocan como banda residente y comparten escenario con invitados. Con el tiempo, las entradas para los encuentros mensuales empezaron a agotarse cada vez más rápido, hasta que en diciembre del año pasado llevaron a cinco mil personas a la rambla de Punta Carretas. Ahora, Cumbia Club, la orquesta cumbiera que no para de crecer, va por su paso más grande: el 31 de agosto llevará su propuesta al Antel Arena junto a invitados de lujo como Natalia Oreiro. La cita es a las 20.00 y quedan entradas a la venta en Tickantel.
“Es un mojón. Luego de eso, no sé, la verdad”, dice y se ríe Hernán Díaz, vocalista y guitarrista de la banda, en charla con el País. “Sin duda que para nosotros será un antes y un después”. Para Díaz, el éxito de Cumbia Club se explica en alguna medida por el espacio que lograron crear para un público que, por lo general, va de los 20 a 40 años: un baile que empieza temprano y no compromete el día siguiente; un ambiente cuidado donde la intención primera es bailar y pasarla bien; y el elemento nostálgico que tiene el hecho de rescatar himnos de la cumbia y, arriba de estos hits, agregar una impronta propia.
“En la historia de la música se ha minimizado el hacer covers, pero nosotros encontramos ahí un valor que tiene que ver con la retransmisión y, sobre todo, con cómo nosotros lo filtramos. No agarramos una canción preexistente y simplemente la ejecutamos, por ahí pasan un montón de cosas, como la formación y la forma de ejecutar de cada músico de la banda. Por eso, para nosotros, tiene un valor especial. Es inevitable que la versión que hagamos de otros artistas tenga mucho que ver con nosotros también”, explica. “Las personas que fueron arrimándose, encontraron un lugar que les posibilita salir temprano y tener un espacio para bailar y que en algún momento toca alguna fibra nostálgica, considerando ese repertorio que hacemos”.
La formación del grupo ha ido cambiando, pero cada integrante que pasó por la banda —actualmente compuesta por 12 músicos y músicas— dejó una marca y sumó elementos que hicieron que en 2019 naciera el impulso de tocar temas propios. Así, su primer material de estudio, Sencillos de fin de año, vio la luz en 2020. Y si por un lado la pandemia frenó la ejecución en vivo de sus primeras canciones autorales, por otro, cuenta Díaz, les brindó el tiempo y el foco para producir y grabar Volvió una noche, su segundo trabajo discográfico, enriquecido con la participación de La Delio Valdez, Loli Molina y Martín Piroyanski.
“Queríamos desafiarnos a salir de un lugar cómodo. Fuimos metiendo a cuentagotas nuestras canciones, intentábamos no corromper lo que ya habíamos construido, que era tocar esta batería de hits de cumbia villera, no queríamos que nuestras canciones fueran en contra de lo otro, siempre intentamos que ambas cosas convivieran”, señala. “Al principio había temores, pero después, al ver que hubo una respuesta muy buena del público y que la gente cantaba estas canciones, nos llenó mucho como grupo”.
Así, con temas propios y los hits que no abandonan, el crecimiento de Cumbia Club ha sido sostenido y llega inclusive a los vecinos de la región. Hace pocas semanas tocaron en Argentina y Paraguay y sienten que la experiencia de empezar a generar público en estos lugares acompaña ese momento de gran convocatoria con el público uruguayo. “Esta fecha en el Antel Arena prende el radar de las personas. Nos damos cuenta de eso viendo en las redes cómo reacciona la gente o inclusive en un cumpleaños familiar, cuando preguntan: ‘¿Che, dónde tocan con la banda?’, decís ‘En el Antel Arena’ y la reacción es: ‘Opa’. Es un lugar que tiene su peso, los artistas que han pasado por ahí y el antecedente de música que ha sonado tiene una carga importante”, dice Díaz.
El compartir como una marca
Por el escenario de los after office de Cumbia Club han pasado artistas como Emiliano Bracciari, Martín Buscaglia, Luana, Julián Kartun, Eli Almic, Fata Delgado y El Reja, entre otros. La colaboración y las presencias ya son una marca registrada de los toques de la banda y ese compartir, además de crear un ambiente rico en música y disfrutable desde la pista, también los ha desafiado y enriquecido como grupo. “Nos ha dejado muchísimo aprendizaje al tener que versionar canciones que por ahí no tienen nada que ver con el género que hacemos. Fue novedoso enfrentarnos a eso de intentar trasladar una canción de otro género con la responsabilidad de hacerlo bien”, comenta.
“Aprendimos muchísimo y nos topamos con música nueva, porque cuando invitamos artistas a participar, hacemos una escucha de su repertorio y, por más de que hayas seguido a un artista por muchos años, por ahí te encontrás con parte de su obra que tal vez no conocías. Además, está el capital humano de conocer a gente que admiramos”.
Como no podría ser distinto, en el escenario del Antel Arena los acompañarán artistas nacionales e internacionales. Desde Colombia llega la banda Los Cumbia Stars y, hace unos días, anunciaron a Natalia Oreiro como primera invitada. “Para nosotros es un honor que ella haya aceptado. De verdad, estamos muy contentos”.
La banda, además, trabaja en nuevos materiales que saldrán hasta fin de año. Pero, de momento, todas las energías están puestas en darlo todo arriba del escenario el próximo 31 de agosto. Ese día escribirán un nuevo capítulo de esta historia que tiene tanto de reversionar lo conocido como de generar comunidad para lograr crear algo nuevo.
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