En abril se llevó el aplauso de los uruguayos durante su paso por el Estadio Centenario junto a Joaquín Sabina. Aquella noche, la cantante Mara Barros, que desde 2009 es una pieza clave de las giras del autor de “19 días y 500 noches”, se paseó por el escenario mientras interpretaba “Yo quiero ser una chica Almodóvar” y luego ofreció una desgarradora versión de “Y sin embargo te quiero”.

Ahora, en diálogo telefónico con El País, agradece aquel recibimiento. “Ustedes son un público muy apasionado, y ahora que volvimos a actuar luego de la pandemia se ha multiplicado el fervor y la pasión porque uno, como público, agradece volver a disfrutar de la música en vivo. Eso se percibe y se respira”, dice y enseguida se interrumpe. “Pero tampoco te creas que hay una diferencia abismal: ustedes siempre nos sorprenden”.

Este domingo a las 20.00, Barros se reencontrará con el público uruguayo con una propuesta diferente: ahora será ella la protagonista. “Soy muy consciente de que cuando estoy acompañando a Sabina, la gente va a verlo a él y que, de paso, me disfrutan a mí”, comenta. “Entonces, ahí voy a divertirme, a pasármelo pipa y si me equivoco se olvida enseguida porque la cabeza es Joaquín; yo soy parte de un engranaje que ayuda a que todo sea más bello”.

“Ahora voy a Uruguay muy emocionada pero también nerviosísima y con un esfuerzo vocal diferente porque serán casi dos horas de concierto cantando y hablando. Me abro y desnudo mi alma, así que la percepción será distinta”, adelanta.

Barros, que ya tiene tres discos solistas, llegará a Live Era para presentar Me nace del corazón, su nuevo trabajo, en la que será la última parada de una gira de shows solistas que ya pasó por Santiago de Chile y agotó fechas en varias ciudades de Argentina. Las entradas se venden en RedTickets y cuestan 1290 pesos.

“Este es un concierto muy íntimo en el que puedo hablar con la gente y mirarla a los ojos para ver cómo reacciona”, explica. “Mi filosofía es que todos se sientan como en el salón de casa, y por eso llego al escenario con dos grandes músicos y amigos. Cuando uno va a la casa de sus amigos, ¿a qué va?”, se pregunta. “Pues a pasárselo bien, y esa mi única expectativa. Espero que la gente se vaya con el corazoncito un poco mejor que cuando llegó”.

Y el repertorio que la cantante traerá a Montevideo la ayudará a cumplir su objetivo. En Me nace de corazón, publicado el año pasado y financiado a través de una campaña de crowdfunding, Barros versiona a nueve clásicos de la canción mexicana y reimagina a himnos populares como “La llorona”, “El último trago” y “No sé tú”. Al respecto, dice: “Son canciones que forman parte de nuestra banda sonora, y si no las hemos escuchado nosotros, al menos lo hemos hecho a través de nuestros padres”.

El álbum, sucesor de Por motivos personales (2017), se presenta como una carta de amor al pueblo y la cultura mexicana. “Es un agradecimiento a un país que me recibe siempre con los brazos abiertos y que me ha dado muchas oportunidades como solista”, explica. “Quería que fuera un regalo personal y por eso con el productor Borja Montenegro quisimos huir del tópico que todo español usa cuando homenajea a la canción mexicana: utilizar mariachi”.

De esta manera, “Un mundo raro” y “Ojalá que te vaya bonito”, las dos de José Alfredo Jiménez, adquieren una nueva personalidad. Sobre esta última, dice: “A partir del mariachi, estábamos muy acostumbrados a que fuera una canción bastante trágica y te hacía imaginar a un tipo sentado en la barra con el tequila hablando del desamor; sin embargo, esa letra es muy esperanzadora porque invita a una expareja a que se enamore de nuevo y que se olvide de él”.

Ambas sonarán el domingo en Live Era, y serán parte de un repertorio que también incluirá temas de Por motivos personales y un repaso de los clásicos que suele interpretar junto a Sabina. “Espero encontrarme con una salita repleta de almas con la mente abierta y con ganas de disfrutar”, concluye.