PERFIL

La visita de María Becerra a Montevideo no podía llegar en mejor momento. La artista, que este año se consagró como la tercera más escuchada de Spotify por los uruguayos, acaba de lanzar La nena de Argentina, su segundo álbum, y lo presentará este domingo en el Antel Arena en un show producido por AM Producciones. Las entradas están agotadas hace semanas y hablan del entusiasmo por ver en vivo a una de las cantantes más populares de la vecina orilla.

La fama de Becerra, de 22 años, es el ejemplo más claro del alcance de las plataformas durante la etapa más restrictiva de la pandemia. Ella, que empezó su carrera como youtuber, había lanzado algunos éxitos a finales de 2019 (”High”, “Tu lady“ y “Dime como hago”) y su nombre comenzaba a sonar entre las nuevas promesas de la música urbana. Con un fraseo inspirado en el legado de Amy Winehouse y de Mariah Carey, y una interesante mezcla entre el R&B, el reggaetón y el trap, la cantante nacida en el barrio de Quilmes generó una sorpresa similar a la que, meses antes, había generado Nicki Nicole con su “Wapo Traketero”: su libertad al momento de jugar con las fusiones y las melodías —al igual que Nicki, es dueña de un buen manejo del vibrato y los melismas— le daba algo que no era común en la escena.

Sin embargo, la irrupción de la pandemia amenazó con descontinuar su creciente fama. Pero en setiembre de 2020, las cosas cambiaron. Apenas lanzó el remix de “High” junto a Tini y Lola Índigo, su nombre empezó a protagonizar playlists de Spotify y su voz debutó en las radios uruguayas. Más adelante, cuando terminó la cuarentena obligatoria en Argentina y de a poco se retomaba la vida nocturna, hizo un movimiento sumamente inteligente y se animó al reggaetón bailable cuando publicó “Confiésalo”, una colaboración con Rusherking, su pareja de ese momento.

Para 2021 se dispuso a conquistar la escena y lo logró con una seguidilla de éxitos como “Animal” (con Cazzu), “Acaramelao” y “Cerquita de ti”. El golpe definitivo llegó en abril cuando se unió nuevamente a Tini para grabar “Miénteme”, una pegadiza canción que mezclaba cumbia y reggaetón, y que ese año se convirtió en la más escuchada de Spotify por los uruguayos. Su voz expandió fronteras y llamó la atención de referentes como Becky G y Mau & Ricky, que grabaron con ella.

Para setiembre ya tenía un primer álbum (Animal) y hasta una colaboración con J Balvin (“Qué más pues?”) que se metió en el Top 10 de las más escuchadas de Spotify en el mundo. Pero le faltaba algo: subir a un escenario. Lo hizo en La Voz Argentina, con “Mal acostumbrao”, que cantó junto a Mau & Ricky, pero recibió numerosas críticas. “Ya sabemos que no fue lo mejor”, admitió tiempo después en diálogo con La Nación. “Quizás muchos artistas tuvieron su primera vez en vivo cantando sus canciones en bares o boliches y se fueron curtiendo con miles de shows antes de tener uno televisado. Yo tuve que aprenderlo a los ponchazos. Me comieron los nervios, pero me la tuve que bancar porque, si bien nunca había hecho eso, ya tenía ‘un nombre’ y la gente esperaba mucho de mí”.

Algo similar le sucedió al mes siguiente, cuando llegó al festival América Rockstars en Punta del Este para el que fue el primer show completo de su carrera. “Antes cantando en vivo yo estaba complicada y lo acepto”, dijo este año. “Me costaba porque no estaba acostumbrada a cantar frente a la gente, a miles de cosas. Ahí dije: ‘Che yo soy cantante, tengo que cantar como los dioses; ahora me subo al escenario y no te erro una nota”. Eso quedó claro en el recital que meses atrás ofreció para Tik-Tok y, especialmente, en su adelanto a capella de “Automático”, la canción que luego se convertiría en uno de sus mayores éxitos.

Es que 2022 fue el año consagratorio de la argentina. Si bien comenzó de una manera amarga con su escandalosa separación de Rusherking —ahora pareja de la China Suárez—, grabó una serie de canciones que superaron ampliamente el éxito de todo su trabajo anterior. “Tranquila”, su colaboración con el cantante y productor FMK, fue uno de los hits del verano; y “Marte”, que grabó con la mexicana Sofía Reyes, fue el tema más escuchado de Spotify en Uruguay entre febrero y abril. Se animó a una balada desgarradora como “Felices x siempre”, una despedida a su exnovio (“Quedaron tantas cosas pendientes, /Pero este cuento ya se terminó, / Sin el ‘Felices por siempre’), al disco funk de “Hasta los dientes” (con Camila Cabello) y publicó “Ojalá” y la ya nombrada “Automático”, que fueron las más populares de los últimos meses.

Ahora lanzó La nena de Argentina, un disco sin colaboraciones en la que apuesta por expandir su paleta musical con una colección de canciones que van desde la cumbia a la bachata, y desde el dancehall al reggaetón. “No saben el amor que le pusimos y lo especial que fue crearlo”, escribió hace días en su cuenta de Twitter. “Quiero que lo escuchen y gocen. Les voy a presentar La Nena de Argentina y también lo que soy y crecí en todo este tiempo”.

Y ese crecimiento se podrá ver este domingo en el Antel Arena, cuando María Becerra llegue a Montevideo para presentar un repertorio repleto de éxitos y demostrar por qué se convirtió en una de las nuevas referentes de la escena rioplatense. Promete ser una fiesta.