LANZAMIENTO
La cantante y compositora uruguaya editó este año su disco debut, producido por el argentino Juanito El Cantor
Tras una seguidilla de singles que ayudaron a generar expectativa, Inés Errandonea lanzó su disco debut La vida real.
Cantante y compositora uruguaya radicada en Buenos Aires, la integrante del coro Coralinas vuelca en su ópera prima su sensibilidad pop al servicio de unas letras honestas, introspectivas, que defiende con una voz plástica y moldeable en función de las intenciones buscadas.
El álbum tiene una producción delicada —mérito de Juanito El Cantor, argentino responsable del Instantes decisivos de Papina de Palma—, llena de variedad tímbrica y arreglos preciosos (por momentos orquestales, por momentos minimalistas, volados), que nunca queda sobrecargada ni opaca lo esencial de La vida real que es el mensaje o, más bien, la intensidad que busca transmitir.
Para salir al ruedo, Errandonea decidió cantar de sus amores, sus miserias, miedos y urgencias, de lo real que quema la piel cada día, y completó un puñado de canciones que encantan, en parte, por esa crudeza que oculta bajo un vestido color pastel.