Redacción El País
El próximo sábado 16 de marzo vuelve Luis Miguel a Uruguay. El músico se encuentra en una gira por Sudamérica. Antes de su presentación en el Estadio Centenario, está Argentina donde presentará una serie de shows con localidades agotadas.

También realizó una cena de gala en Buenos Aires que vendió 2.200 tickets y cuyas entradas costaban entre 800 mil y un millón de pesos argentinos. O sea, de 37 mil a 45 mil pesos uruguayos.

Para el concierto en el Centenario, las entradas se adquieren por Acceso Ya, y los precios van desde 2.700 pesos para el tercer anillo de la Tribuna Olímpica, a 17.200 pesos para la Platea Vip.

A pocos días de su arribo a Montevideo, El País pudo conocer la lista de exigencias del artista antes de su presentación en el Centenario.

Entre los requisitos más extravagantes se encuentra el pedido de "36 rosas blancas de tallo largo sin espinas y sin hojas en la tarde previo al show". Además, los camerinos tienen que estar cubiertos con tela, y se pidieron "100 pies de tela negra para construir pasillos en el área detrás del escenario o como punto de entrada para el artista".

También se pidió una lista de otorrinolaringólogos disponibles en la ciudad, "en caso de que el artista o su equipo los necesite".

Foto: Difusión

A Uruguay, Luis Miguel llegará acompañado por una banda de 20 personas, a los que se suman tres personas para el coro, y 20 mariachis. El pedido total del catering es para 130 personas. También se solicitó que "todas las comidas deben servirse en platos de cerámica y con utensillos metálicos". O sea, ni platos de papel ni cubiertos de plástico.

Además hay especificaciones para el escenario, que deberá tener 25 metros de boca y 15 de profundidad, ya que la escenografía viene con la gira.

También se agregó una lista de vinos solicitados: Cabernet Sauvignon Purple Angel; Bettina Bryan 2016 o vino tinto Lapostolle Clos Apalta, 2018.

En el camerino tiene que haber: 4 velas aromáticas de vainilla, un sofá de dos cuerpos para camerino cómodo y limpio en color claro, no gris; un sofá de tres cuerpos del mismo color; una mesa ratona; cuatro lámparas de pie; un purificador de aire; un espejo de cuerpo entero grande; un espejo para maquillaje con luces, y un florero con doce rosas blancas.

En cuanto al catering para el camerino, tiene que haber: una bandeja con fruta fresca cortada, una bandeja con variedad de quesos para dos personas, almendras orgánicas con sal, un bowl con limones y limas, jengibre, tés surtidos, botellas de agua marca Fiji, botellas de agua marca Essentia, botellas de Electrolyte sabor coco, botellas de Vitamina Water Energy color amarillo, y botellas de agua de coco marca Harmless Harvest. También cuatro copas grandes de vino tinto.