Tito Nieves y Víctor Manuelle hablan de "Cosas del amor" y cuentan por qué la salsa romántica tiene tanto éxito

Los cantantes, dos referentes de la salsa romántica, dialogaron con El País sobre su versión del clásico de Ana Gabriel y Vicky Carr y analizaron el concepto que inspiró al disco "Retromántico".

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Tito Nieves y Víctor Manuelle.
Foto: Difusión.

Tito Nieves y Víctor Manuelle están a miles de kilómetros de distancia, pero se ríen como si estuvieran en la misma habitación. Nieves, intérprete de clásicos como “Sonámbulo” y “Fabricando fantasías” y conocido como “El Pavarotti de la salsa”, está en su casa de Puerto Rico mientras que su compatriota habla desde Colombia, donde viajó para presentar Retromántico, el disco donde homenajea al sonido que marcó una época. Como adelanta su título, lo nuevo de Manuelle es un tributo a la salsa romántica de finales de los ochenta y principios de los noventa, esa que el cantante de “Apiádate de mí” y “Tengo ganas” escuchaba en su adolescencia.

Para completar el viaje retrospectivo, convocó a varios referentes del género como Gilberto Santa Rosa, Johnny Rivera, Maelo Ruiz, Willie González, Frankie Ruiz y Nieves, y grabó una serie de duetos que comprueban por qué cada uno se volvió una figura. Junto a Nieves, Manuelle cantó “Cosas del amor”, la balada que Ana Gabriel y Vicky Carr lanzaron en 1991.

Y si bien trasladaron la canción al universo salsero, quisieron ser fieles al video original y lo recrearon con una meticulosidad admirable. “Es un homenaje doble a ‘Cosas del amor’”, le cuenta Manuelle a El País a través de una videollamada. “Como el disco se llama Retromántico y estamos hablando de cosas retro pensé que podíamos trasladarnos a ese video noventoso. Así que recreamos todos los detalles: desde los cuadros, las gafas, el sillón y el color de la pared. Como la versión salsa cierra con unos mambos, unos coros y unos soneos que en la original no estaban, metimos el making of de la recreación para que la gente viera lo divertido que fue hacerlo. Con Tito estamos muy satisfechos con el resultado y sentimos que tenemos un superéxito en nuestras manos”.

—La primera vez que escuché “Cosas del amor” recordé la versión de “Por ese hombre” que grabaron junto a Brenda Starr en 2002. En esa canción, Tito se queda con la novia de Víctor, y ahora Tito aconseja a Víctor en medio de una crisis amorosa...

Manuelle: ¡Tito siempre sale ganando! (Se ríe) En aquel tema se ha quedado con la muchacha, y aquí soy yo el que tiene el problema y él me aconseja...

Nieves: (Se ríe) Desde entonces él se ha enojado conmigo, y no ha querido grabar más...

—¡Tuvieron que pasar 22 años hasta que publicaran una nueva canción juntos!

Nieves: ¡Sí! (Se ríe) Aunque déjame decirte que “Cosas del amor” tiene mucha importancia para nosotros. En aquel entonces, cuando Ana Gabriel y Vicky Carr la grabaron fue, como tú has dicho, una amiga que aconseja a otra. Hay millones y millones de hombres que sufren a diario y que buscan a un amigo que lo entienda. Las mujeres suelen tener un concepto de que nosotros somos fuertes y que no sufrimos, pero claro que sufrimos bastante... y también lloramos. Esa es la mayor importancia de esta canción: no se trata solo de dos hombres que graban lo que cantaron dos mujeres, es una forma de demostrar que nosotros tenemos el mismo sentir.

—Víctor, así como se trabajó para recrear cada aspecto del videoclip de “Cosas del amor”, esa intención es la misma que define al abordaje musical de Retromántico. ¿Qué tan importante era recuperar esas raíces para este disco?

Manuelle: El proyecto nace de una búsqueda. Luego de celebrar mis 30 años de carrera, hubo algo en mí que me hizo pensar qué quería hacer ahora. En el último tiempo me he dedicado a innovar y a grabar con muchos artistas urbanos, pero me di cuenta de que cuando voy a países como Chile, Perú, Colombia y Uruguay lo que más se escucha en las radios es la salsa romántica. Algo me dijo que había una necesidad de rescatar ese sonido, y entonces me metí al estudio con el productor Efraín “Junito” Dávila y le dije que quería hacer un disco que se llamara Retromántico. Tenía que sonar a los ochenta y noventa, y por eso tiene ese cuidado en la lírica de las canciones, en la melodía y las interpretaciones, y en el sonido del piano y los teclados. El concepto se completó cuando grabamos las colaboraciones con las personas que me influyeron.

—Tito, tú empezaste tu carrera como corista de Héctor Lavoe antes de dedicarte a la salsa romántica. En esa época se la desacreditaba llamándola “salsa monga” por la ausencia de las descargas. ¿Cómo recuerdas ese cambio?

Nieves: Cuando yo me hice en la música, en 1975, el ambiente era más machista porque en la música importaba más el ritmo que la lírica. Se ponía más atención, como tú dices, a la descarga del timbal, el bongó, la conga, el trombón y el piano. Cuando se empieza a fusionar la balada con la salsa, lo que pasa es que las mujeres son las que más entran a comprar los discos. Y está comprobado, como dijo Víctor, que los éxitos más grandes de este género llamado salsa —que para mí es más una cultura que un sonido— son las canciones de amor. Por eso creo tanto en este concepto de Retromántico, que va a ser un éxito rotundo.

—Víctor, en el video de presentación del disco mencionaste que ese sonido te llevaba a la época en que ibas al liceo. ¿Qué es lo primero que te viene a la mente cuando recordás esa etapa?

Manuelle: Pienso en la época en que escuchaba a Gilberto Santa Rosa, Eddy Santiago, Frankie Ruiz y a Tito, y me pasaba el día en mi casa escuchando sus discos y haciendo como que cantaba frente a un espejo. Todas esas canciones eran románticas, por eso yo quería trasladarme a esa época. Siento que lo logré y ya me lo ha dicho el público y hasta algunos periodistas: tendría hacer un Retormántico II. El productor Ramón Sánchez , con quien trabajé en “Casi perfecta”, me dijo que desperté a un pequeño monstruo (Se ríe). Yo creo que recuperamos un sonido que ha estado vivo todo este tiempo pero que, por estar buscando cómo innovar, lo dejamos de hacer. Ahora entendí que la fórmula ya está hecha, y es lo que la gente quiere escuchar.

—El año pasado celebraste tus tres décadas de carrera. Retomando la época en que cantabas las canciones de tus ídolos frente al espejo, ¿qué sentís que se mantiene inmune al paso del tiempo?

Manuelle: El respeto y la admiración hacia mis compañeros. Ellos no se daban cuenta, pero cada vez que entraba al estudio con alguien como Tito o Gilberto, yo estaba viendo a mi ídolo y no a mi compañero. Lo primero que pensaba era que no podía ser que a todos los que escuchaba en la escuela hayan aceptado trabajar en este proyecto. Entonces, cuando abrían la boca, en mis adentros yo decía: “¡Yes!” (Se ríe). Porque yo me imaginaba a alguien como Tito en “Cosas del amor” pero aún no lo había escuchado, entonces cuando él empezó a cantar yo pensaba: “Esto era justo lo que quería”...

Nieves: Yo apoyo a mi amigo y mi hermano, y voy a decir algo que sentí la primera vez que escuché Retromántico: pensé en el concepto de Siembra, de Ruben Blades. ¡Recuerden esto que estoy diciendo!

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