Redacción El País
"Ya no puedo con más mentiras", dice Celine Dion en I Am: Celine Dion, el documental que llegó este martes a Prime Video y en el que cuenta las intimidades de una vida marcada por el síndrome de persona rígida que sufre hace 17 años, y que la ha cambiado completamente.

En la película, la cantante cuenta cómo el uso de medicación para paliar el dolor por su trastorno ha ido en aumento y confiesa que llegó a tomar entre 80 y 90 miligramos de Valium diarios. Esa fue apenas una de las estrategias a las que acudió para poder seguir con los conciertos en vivo: "Hacía trampas, como darle golpes al micrófono como si fuese culpa del sonido. A veces teníamos que parar el show para cambiarme de ropa, pero ya no volvía", explica sobre lo que pasaba cuando las pastillas dejaban de hacer efecto en plena actuación.

Uno de los momentos más duros del documental se ha viralizado en las últimas horas, y es cuando Celine Dion sufre un ataque en pleno rodaje. Se la ve acostada en una cama, con la cara transformada por el dolor, mientras recibe asistencia médica; ella quiso que las imágenes fueran parte del proyecto y salieran a la luz, para ofrecer un retrato completo de su vida actual.

I Am: Celine Dion dura 90 minutos y de alguna forma explica el hecho de que la cantante de "My Heart Will Go On" se haya tenido que alejar de los escenarios. Su síndrome es extraño y afecta a una persona entre un millón; se trata de un trastorno neurológico que causa una rigidez ascendente, y se caracteriza por episodios de espasmos musculares con mucho dolor.

"El año pasado me puse tan mal que no podía ni caminar. Perdía el equilibrio y me dolía mucho. Sigo sin poder usar la voz. Echo mucho de menos la música, pero también a la gente", dice en un proyecto del que son parte sus hijos y su entorno más cercano.