Redacción El País
Una de las frases más repetidas de la historia es que no todo es lo que parece, y más cuando se trata de polémicas en programas de televisión. Eso viene a cuenta porque a pesar de que a veces los debates pueden ponerse ásperos, el equipo de Esta boca es mía demuestra que, cuando se apagan las cámaras, hay una excelente relación de camaradería atrás.

Así quedó comprobado en el registro que hizo la propia Victoria Rodríguez de una cena que compartieron en los últimos días, y que incluyó tanto parrillada como guiso, hecho por uno de los panelistas.

La anfitriona fue la conductora, que recibió a todos en su propia casa. "Otra noche de Esta boca en casa. Otra noche de cuentos e historias de Funes el memorioso, de carcajadas y confesiones peligrosas", bromeó, picante, Victoria Rodríguez. "Los quiero compas".

Acompañó un mensaje con un video en el que se podía apreciar el espíritu cálido y hogareño del encuentro, y la presencia de algunos de los que trabajan delante y detrás de cámaras como Conrado Polvarini, Conrado Hughes, Alfredo García, José "Pepe" Sena y así. Diego Martín Olivera, Pablo Casas —quien aseguró que "el asado marxista" no puede faltar— y Gastón Espino también fueron de la partida.

Al video no le faltaron el humor ni las risas, que varios comentaristas valoraron en relación al tono confrontativo que puede tener el programa de Canal 12 que, justamente, se caracteriza por debatir temas de actualidad.

De hecho, Victoria pidió un "aplauso para el guisador", que fue el exdiputado del Nuevo Espacio Jorge Pozzi; había sido el primero en llegar a la casa y tomó las riendas de la cocina, con un resultado que fue aplaudido por sus compañeros. Pero después se quedó dormido en el sillón a medida que pasaban las horas, y la conductora no dudó en exponerlo con una broma: "Eso si, el tipo quedó exhausto".