Redacción El País
La polémica entre Ignacio Álvarez, el candidato Yamandú Orsi y el expresidente José Mujica en las afueras del Grupo Magnolio avivó una pelea entre el periodista de La Pecera (Azul FM) y Darwin Desbocatti, personaje interpretado por Carlos Tanco en No toquen nada (Del Sol). El jueves, Desbocatti lo tildó de "youtuber impertinente", "idiota" y "trastornado" en su columna, y Álvarez le contestó al aire: "Si tiene los huevos para decírmelo de frente que lo haga". Hoy viernes, Desbocatti volvió a arremeter contra su compañero del multimedio con su habitual acidez.

Le contestó, entre otras cosas, que no le correspondía a él tocarle la puerta del estudio para decirle que se había comportado "como un youtuber de 30 años que a su vez se comporta como noteros de CQC": "Para mí eso no es tener huevos, es tener demencia senil. Eso es estar a dos semanas de tocarle el culo a las enfermeras", discrepó.

Y se despachó: "Me parece que pasaste un poco el ultrasonido del ridículo se lo tienen que decir sus amigos, y no ir hasta ahí en el medio del programa. Me parece muy desubicado ir a decirle eso a alguien. Me preocuparía sobre todo de mí mismo".

Calificó estos intercambios generados a raíz del abordaje de Álvarez y Orsi con el fin de conseguir una entrevista, como "guerra de divas". "Es una pelea para alquilar concheros", expresó con su típica ironía. "Es una pelea vedépica, para alquilar faisanes, los despluma y se los pone uno mismo, dijo en otro tramo de la columna.

Además, calificó el hecho como un "Mongoliazo": "¡Qué bien que le hace esto al grupo Mongolio (así e refiere Desbocatti al multimedio). Todos hablan del Grupo Mongolio. Nos metimos en el cierre de la campaña. Es el grupo 'Ringolio'. Todo pasa por acá. Histórico".

Fotos: Archivo.

En otro tramo de la columna de actualidad, el personaje que encarna Tanco se preguntó: "¿Se enojó Nacho Álvarez? Parece que se me respondió al aire de una manera muy, muy violenta. Todo haría pensar que no le cayó bien".

En ese momento, Joel Rosenberg, periodista e interlocutor de Desbocatti en la columna, acotó: "Todo haría pensar que no escuchó lo que dijo porque fue mientras usted salía al aire". Y le dio pie para sumar otra divertida hipótesis: "Es evidente que lo manijearon en La Pecera. Culpo a Christian Font, que es muy de repartir brownies y hacer eso", comento´.

Y enseguida se refirió a una antigua rivalidad que tiene con el también periodista de Santo y Seña (Canal 4), que data de la época en que nació el personaje de Darwin Desbocatti, más de dos décadas atrás en Sarandí, junto al propio Alvarez: "Es una pena porque no voy a poder recuperar esa linda amistad que nunca tuvimos. Qué dura es la vida a veces con los afectos que uno no tiene".

Y concluyó: "Se lo tomó a mal. Ojo, porque al final dice que se lo toma con humor pero a mal. Se lo toma a malhumor. Es extraño porque en mi cabeza sonaban simpáticos mis comentarios. De un idiota a otro idiota".