Tras aparecer involucrada en el escándalo que rodea a Fede Bal, y luego de que se viralizaran supuestos chats que ella habría mantenido con el mediático, Flor De la V realizó ayer un duro descargo en Intrusos.
La conductora del programa de chimentos aprovechó el espacio para abordar, sin matices, la situación en la que se vio implicada. Trascendidos aseguraron que habría sido una de las figuras famosas que tuvo relaciones extraoficiales con el actor, acusado de múltiples infidelidades a su última novia. Incluso se viralizaron chats que, se supo luego, eran falsos.
Eso no impidió que De la V se explayara sobre el tema, en un editorial en el que abordó la temática de la identidad trans y de la discriminación que ha sufrido a lo largo de los años, así como del empoderamiento que alcanzó con el tiempo. "Soy una travesti orgullosa de mi cuerpo y me amo con todo mi ser", fue la frase que resumió sus palabras.
"¿Por qué voy a hablar de este tema? Porque tengo un sabor amargo, porque hay algo que sucede hace muchísimos años en el espectáculo puntualmente, que tiene que ver con la violencia que vivimos las identidades trans, travestis y trans", comenzó la conductora, que aseguró que cuando a Bal se lo vinculó con ella, se hizo desde el lugar de sumar "lo monstruoso (...) la perversión, el pecado, lo pecaminoso, el tabú, lo morboso".
"Desde que yo debuté, no hubo un día en que no se hayan metido con mi sexualidad. Se han burlado, bastardeado; disfrutaban hiriéndome. (...) En este mismo estudio, con una pantalla, me ponían a mí en cámara lenta, enfocando con un zoom mis genitales, burlándose de mi identidad travesti, haciéndome sentir vergüenza por lo que yo era", dijo.
"Cuando fui madre, el momento más maravilloso de mi vida (...), no saben cómo lloré, cómo sufrí durante los dos primeros años, porque no paraban de lastimarme, de herirme, de violentarme. ¿Con qué? Con mi identidad travesti", siguió De la V, ya emocionada y ante el silencio absoluto de sus compañeros de programa.
"No hay un año en que no se hayan metido con mi identidad, como que estuviera mal, como que era un monstruo. ¿Y saben qué me pasa hoy? Llegué a sentir vergüenza de mi identidad, porque eso me hacían sentir: vergüenza de ser", reconoció. Pero remató: "No tengan vergüenza, nunca. No les voy a dar ese poder nunca más. No tenemos nada malo. Soy una travesti orgullosa de mi cuerpo y me amo con todo mi ser. Años me llevó decirlo, y te lo digo a vos, a todos. A vos que te mofaste mientras te burlabas de mí, no te da la cara (en alusión a Jorge Rial). A ninguno de los conductores que pasó por acá les da la cara. ¿Pero saben qué les digo a los que están mirando? No tengas miedo de nada. Que nadie te haga sentir vergüenza de tu cuerpo, jamás. Sos maravillosa, maravilloso, maravillose. Hoy esta silla me toca ocuparla a mí, una trava orgullosa de su cuerpo y sus genitales. Y no les voy a dar ese poder nunca más".