En base a La Nación (GDA)
La sociedad de la nieve, película de Netflix dirigida por el español J.A. Bayona que recrea la historia de la tragedia (o milagro) de los Andes, lo hace desde una óptica distinta: el relator de la historia no es uno de los deportistas supervivientes, sino que es Numa Turcatti, un estudiante de derecho que decidió acompañar a sus amigosen el fatídico viaje.
Además de su fotografía impresionante y de la gran reconstrucción de época que hace, la elección de que fuera Numa quien dirija el relato es una de las claves de su éxito. Tras un exhaustivo casting, que duró siete meses, Bayona eligió darle el papel al actor uruguayo Enzo Vogrincic.
A pesar de haber protagonizado el largometraje 9, en el que interpretó a un futbolista inspirado en Luis Suárez, y de haber participado de La noche de 12 años y de las series Porno y helado e Iosi, el espía arrepentido, la formación de Enzo, es esencialmente teatral. De hecho, fue sobre el escenario que comenzó, sin saberlo, su derrotero para conseguir el papel de Numa.
Y es que Vogrincic se encontraba haciendo una obra de teatro en Buenos Aires, cuando la directora de casting de La sociedad de la nieve lo vio actuando y lo invitó a presentarse a la selección.
Además del exhaustivo proceso que atravesó, y sin saber de qué producción audiovisual se trataba, tras haber sido elegido para la película, Vogrincic relató que vivió un conflicto muy concreto durante las grabaciones.
"Mientras estaba en el proceso de casting y hasta que me dicen que quedé, venía de ser durante cuatro años vegano, de manera ininterrumpida", introdujo, en entrevista al diario La Nación.
"Cuando me llegó esta propuesta y me cuentan cómo era el plan de rodaje, cómo íbamos a filmar y la subida y bajada de peso que requería el personaje, los nutricionistas me dijeron que con una dieta vegana no iba a poder aumentar de peso y me dijeron que no se hacían responsables. Me hablaron muchas veces para convencerme de que cambiara la dieta y yo entré en un conflicto muy grande", contó.
Para resolver el dilema, el uruguayo relató haber conectado su conflicto personal con el que había vivido Numa Turcatti en el fuselaje en 1972.
"Comencé a conectar lo que me estaba ocurriendo, esa dificultad que estaba teniendo para asumir algo en pos de otra cosa que iba más allá de mí, con lo que le pasó a Numa, que se negaba a comer carne humana. Y lo empecé a usar", siguió.
"Me dije: ‘Esto también es experiencia para el personaje’ y con dolor, asumo esto y me hago cargo. Y volví a comer carne, y volví a pasar por esos pensamientos que uno detesta, porque ya había tomado una decisión basada en mis creencias", explicó el actor.
"Fue complicado, pero también me ayudó a acercarme muy lejanamente o no a la sensación de hacer algo que crees que no está bien porque sabés que no tenés opción", finalizó.