Redacción El País
Este miércoles a la tarde, Carlos Perciavalle se reencontró con Antonio Gasalla después de tres años. La reunión tuvo lugar en una clínica de Buenos Aires, donde Gasalla está internado, y el uruguayo llegó acompañado por Jimmy Castilhos, su flamante esposo.
Según informó el medio argentino Teleshow, el argentino sufre un "daño cognitivo grave" que le hizo "perder la memoria y casi no estar conectado con la realidad". Por eso, a fines del año pasado su familia, integrada por su hermano Carlos y su cuñada Nieves, decidió trasladarlo a un centro de rehabilitación en Buenos Aires.
Antes de su visita, Perciavalle fue abordado por la prensa en la puerta de la clínica y habló brevemente sobre el significado de este reencuentro. "Estoy un poco nervioso, lógicamente, pero tengo mucha alegría de volver a ver a Antonio después de tanto tiempo", comentó. "Hace como tres años que no lo veo; él estaba todavía en su casa. Hablábamos bastante seguido, pero después se judicializó y para hablar con él había que pedir permiso al juez", detalló.
Luego, sumó: "Pero al llegar a Buenos Aires, hablé con Marcelo Polino (periodista y amigo de Gasalla) y me dijo que podíamos ir juntos. Va a ser muy emocionante para Antonio y para mí porque vivimos una vida entera; lo conozco desde que tengo 17 años".
El actor comentó que para estar al tanto de la salud del artista de 83 años se mantiene en contacto con el hermano, Carlos Gasalla. Más adelante, en diálogo con el programa A la tarde, dijo que se sentía "muy contento" de que su esposo fuera parte del reencuentro. Sin embargo, aclaró: "Él no va a poder entrar porque se tiene que quedar en una sala de espera, pero yo le voy a llevar (a Antonio) sus saludos".
La visita duró poco más de una hora, y a la salida de la clínica el uruguayo volvió a hablar con la prensa, esta vez acompañado por Polino y Castilhos. "Le conté que lo veía muy bien, que me casé, que tengo un marido joven y hablamos de otras cosas muy agradables", detalló. Enseguida, un periodista le preguntó si Gasalla estaba lúcido durante el encuentro. "Sí, yo podría decir que sí. No habla mucho pero...". Polino, entonces, tomó la posta: "Bueno, no conecta mucho con el tiempo y el espacio, que es típico de la enfermedad, pero está cuidado".
Otra periodista le preguntó a Perciavalle si Gasalla lo había reconocido "Sí, yo creo que sí porque le di varios besos en la cabeza, en la mano y en el cuerpo, y sonrió muchas veces mirándome. Está muy grave, pero está muy bien atendido, y mantiene esa capacidad enorme para recibir amor, a pesar de la enorme timidez que tiene desde chico. Fue un placer estar con él", cerró.