La Nación/GDA
Desde que comenzó la huelga de actores que mantiene en vilo a Hollywood, varios actores fueron retratados en las manifestaciones que se llevan a cabo en las afueras de los edificios de los grandes estudios de cine y de las principales plataformas de streaming. Una de ellas fue Mandy Moore. La actriz participó del piquete que se organizó este martes frente a las oficinas de Disney en Burbank, Califormia. Allí, la protagonista de This Is Us explicó a la prensa cuál es el principal motivo por el que decidió plegarse a la medida de fuerza del sindicato SAG-AFTRA.
“El tema de las reproducciones residuales es un gran problema”, indicó Moore. “Los actores que trabajamos en programas que resultaron exitosos somos muy afortunados, pero los colegas que estuvieron en esta posición años atrás podían vivir de lo que se les pagaba por las reproducciones o, al menos, pagar cuentas”.
Centrándose en su situación, explicó que a pesar de que This Is Us es una de las ficciones más populares de los últimos tiempos, apenas cobran “cheques muy pequeños” por la visualización residual. “Mi gerente comercial me informó que recibí pagos por uno y dos centavos”, explicó la protagonista de la serie de NBC, que fue adquirida por Hulu en 2017 y que tuvo siete temporadas. Se las puede ver por la plataforma de streaming Star+.
En la manifestación, Moore se mantuvo junto a su amiga Katie Lowes, actriz de Scandal. Su colega también indicó que desde hace tiempo viene ganando apenas centavos desde que Netflix obtuvo los derechos de transmisión del programa. “Si sos alguien que tuvo la suerte de haber trabajador hace 10, 15 o 20 años en una ficción que superó los 120 episodios, lo que ganabas por la retransmisión te ayudaba a sostenerte en años en los que te abocabas a proyectos más pequeños, o a trabajar en el teatro, o si querés formar una familia y dedicarte por un tiempo a la crianza de tus hijos”, señaló Lowes. Y remató: “Y eso ya no es una realidad. Todo el modelo ha cambiado”.
La huelga de SAG-AFTRA, que se sumó a la que mantienen los guionistas de Writer’s Guild of America (WGA), entró en vigencia la semana pasada después de que no se llegara a un acuerdo con la Alliance of Motion Picture and Television Producers (AMPTP), la asociación que representa a más de 350 grandes estudios y gigantes del streaming. Fran Drescher, presidenta del sindicato de actores, emitió un comunicado a los 160 mil afiliados aludiendo que “no tenían otra opción” que ir a la huelga.
“Lo que nos está pasando a nosotros está pasando en todos los campos laborales. Los empleadores se olvidan de los contribuyentes esenciales que hacen funcionar a la máquina”, dijo en una apasionada conferencia de prensa. ”No teníamos opción. Somos las víctimas de una organización muy codiciosa. Estoy sorprendida por la forma en que las personas con las que hemos participado en este negocio nos están tratando. No puedo creer lo lejos que estamos en tantas cosas. Cómo alegan pobreza y pérdidas de dinero mientras dan millones a los ejecutivos. Es repugnante. Me avergüenzo de todo esto”, aseguró la protagonista de La Niñera.
El paro implica el cierre inmediato de toda producción cinematográfica y televisiva del que participan los afiliados a la entidad no solo en los Estados Unidos, sino alrededor del mundo. Los actores, a partir de la medianoche del jueves, también dejarán de participar de cualquier encuentro promocional y actividad de prensa. Hasta que se levante la huelga no habrá entrevistas ni alfombras rojas con actores presentes, situación que amenaza la realización de algunos encuentros muy significativos previstos en el calendario anual de la industria del entretenimiento. La convención Comic-Con (que tradicionalmente se realiza a fines de julio en San Diego, California), los festivales de cine de Toronto, Telluride y Venecia, y la ceremonia de entrega de los Emmy, todos ellos planificados entre agosto y septiembre, corren ahora peligro cierto de realización y podrían suspenderse.
La huelga se hace en reclamo de mejoras en las remuneraciones para los actores y medidas de protección contra los riesgos de manipulación abiertos por el uso de la inteligencia artificial en la imagen de los intérpretes. “Este es el momento de la verdad. Si no nos mantenemos firmes, todos estaremos expuestos a ser reemplazados por máquinas y grandes empresas que se preocupan más por Wall Street que por ustedes y sus familias. ¿Qué hacemos moviendo muebles en el Titanic? Se terminó el baile. Nos mantenemos erguidos. Exigimos respeto y recibir lo que corresponde por nuestra contribución. Compartan la riqueza porque no pueden existir sin nosotros”, agregó Drescher en su discurso.
Matt Damon, a su vez, reveló en el preestreno de Oppenheimer que muchísimos actores no llegan al piso de 26 mil dólares anuales de ingreso exigidos para asegurarse una cobertura de salud. “El 98 por ciento de los afiliados al SAG votó por la huelga”, agregó.
-
Se paraliza Hollywood: actores se sumaron a la huelga y denunciaron "engaño" de los estudios
Los actores de Hollywood están cerca de ir huelga junto a guionistas: ¿se puede paralizar la industria?
La niñera revolucionaria: cómo Fran Drescher pasó de ser estrella de los 90 a liderar gran huelga de Hollywood
Claves para entender el conflicto laboral en Hollywood que podría dejarnos sin series y películas
Conflicto en Hollywood por el uso de inteligencia artificial sobre la imagen de los actores