Redacción El País
Ignacio Álvarez cerró de una forma distinta el programa especial de Santo y Seña previo a la segunda vuelta electoral. Luego de una jornada que lo tuvo por protagonista por el fuerte cruce que mantuvo con Yamandú Orsi en el edificio de Magnolio y la posterior difusión de una conversación privadaque había mantenido con él días antes, el periodista se extendió en un editorial dedicado al candidato frenteamplista.

"Yamandú, los dos queremos los mejor para el país, así que si sos presidente te deseo lo mejor", le dijo mirando a cámara. Enseguida aclaró que en caso de que fuera elegido Álvaro Delgado, también le "deseaba lo mejor", y pidió "dejar atrás estas rencillas para privilegiar lo que más importa". "Desde mi lado de periodista lo que quiero es es tener una mejor sociedad. Estoy seguro que vos también", expresó dirigiéndose a Orsi.

Luego se refirió a "toda la clase política" y pidió "dar nuestra mejor versión para que Uruguay pueda crecer y ser digno de ese sentimiento que nos enorgullece a tantos". "Lo mejor para esta votación", deseó sobre el final del programa poniendo paños fríos a las tensiones.

Álvarez abrió el programa Santo y Seña de este miércoles hablando del altercado que había mantenido con Orsi horas antes y a muchos en redes sociales les llamó la atención el zócalo que aparecía debajo mientras hablaba el conductor. A la vez que el periodista se explayaba sobre lo sucedido, Canal 4 puso al aire una gráfica que expresaba: "Las opiniones vertidas en este espacio son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente los valores y pensamientos de Canal 4".

Antes de despedirse, Álvarez también habló sobre esta situación y reconoció que el canal le pidió "que no emitiera las imágenes de Yamandú Orsi del viernes a la salida de la radio ni las del incidente procurando la respuesta de Orsi para ver si iba a cumplir con su compromiso de darme una entrevista en la radio".

En concreto sobre la gráfica del canal, el conductor comentó que muchos le estaban escribiendo "por el sobreimpreso que aparecía": "No tengo nada para decir. Así es y así debe ser. Sería imposible que un canal tenga una sintonía necesaria y obligatoria con los pensamientos de cada uno de los que están frente a la cámara con un micrófono. No puede pretenderse eso de ninguna manera".

Pese a que el canal le prohibió emitir las imágenes de su encuentro con Orsi el viernes y también las de su altercado con él el miércoles, y que además colocaron este sobreimpreso mientras él hablaba, Álvarez celebró la libertad con la que trabaja en la empresa. "Acá no hay un libreto, no hay una censura, no me están diciendo 'qué palabrita vas a manejar'. Yo espontáneamente elijo qué decir con total libertad, y la empresa tiene la libertad de poner un sobreimpreso con esta aclaración porque no sabían lo que iba a decir", comentó. Y reafirmó: "De eso se trata la libertad de prensa, que se pueda hablar de esta manera".