Redacción El País.
Las vacaciones de invierno van llegando a su fin y no fueron pocos los que eligieron el calor del hemisferio norte para unos días de desenchufe. Entre ellos, varias personalidades de los medios.
Claudia Fernández eligió Italia para una escapada familiar. Desde Capri, Pompeya o Napoles, la comunicadora compartió postales veraniegas, donde no faltó el recorrido cultural y las jornadas de playa en el Mediterráneo.
La periodista Viviana Aguerre viajó con su marido y su hijo a Estados Unidos. Primer destino: Las Vegas, donde la familia vibró con el partido de Uruguay ante Brasil, que fue triunfo por penales. En redes sociales, la comunicadora de Canal 4 compartió postales de la felicidad con la que viven la travesía. Seguirán por otras ciudades de Estados Unidos y un infaltable pasaje por Miami a disfrutar de la playa.
El periodista de Telemundo José Ignacio Romero y su pareja italiana, Alessandra Crugnola optaron también por Estados Unidos. Se lo vio felices caminando por Times Square, en Nueva York.
Andrea Vila optó por el Caribe mexicano. Junto a su pareja y su hija, pasaron unos días a puro sol y playa en Tulum. “Último día de vacaciones y ya extraño esta playa increíble. Si estás planeando un viaje, este lugar es un sueño. Bahía sin olas, agua cristalina, calentita y nada de sargazo”, escribió al compartir postales.
La odisea de José Redondo: sol, playa y un ¡huracán!
José Redondo, músico e integrante del staff de La Pecera (Azul FM) pasó unos días en Riviera Maya y allí vivió una experiencia traumática, pero con final feliz. Justo cuando había desembarcado en Playa del Carmen con su pareja Pabla de Pena (la popular “Pabla Pablita”) se anunció y luego pasó el Huracán Beryl, cuyo pasaje por Jamaica había sembrado destrucción y pánico.
“Me enteré por un diario local que se venía el huracán”, cuenta Redondo a Sábado Show. Luego, la localidad empezó a transformarse: con calma, se fueron cerrando y tapiando los locales. En el hotel donde estaban alojados, los empleados les dieron recomendaciones y se fueron. “Eso fue increíble. Se fueron y no había nadie”, comenta.
El huracán llegó en la madrugada y Redondo se mantuvo en vela. Hubo corte de luz, lluvia y viento muy fuerte. "Cerca a las 4 de la mañana se dio el viento más fuerte. Vibraba todo el hotel, se rompían vidrios y se sentían el ruido de la caída de palmeras", relata el "exgordo" Motoneta. El episodio le hizo acordar a Redondo lo vivido el 23 de agosto de 2005 en Uruguay, con se registró una tormenta extratropical.
Redondo y Pablita habían comprado víveres "como si no hubiera mañana" por si el encierro duraba varios días, pero se extendió, afortunadamente, solo por 24 horas. Al salir constataron daños pero no hubo víctimas. Beryl llegó a la Riviera Maya como huracán categoría 2. "La gente está muy preparada. En la previa, ponían chapones de madera en las ventanas para que no se rompan los vidros", relata. "En muchos hoteles desalojaron a la gente o los ponen todos en pisos superiores porque si están contra el mar, sube la marea y se puede inundar la planta baja", asegura.
Luego de esta clase improvisada sobre protección ante huracanes, la familia regresó a Uruguay.