Graciela Alfano acusó a su exnovio uruguayo de maltrato psicológico: "No se lo deseo ni a mi peor enemiga"

La exvedette y actriz argentina brindó más detalles de su separación del empresario uruguayo Carlos Bustin y no solo se refirió a su coqueteo con mujeres jóvenes, sino que habló de maltrato psicológico.

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Graciela Alfano en la celebración por los 25 años de la bodega H. Stagnari.
Graciela Alfano en la celebración por los 25 años de la bodega H. Stagnari.
Foto: Gerardo Roda

Redacción El País
El romance entre Graciela Alfano y el empresario uruguayo Carlos Bustin ya es parte del pasado. La noticia llega un año después de que la exvedette y modelo argentina revelara su romance con Bustin, a quien en su momento definió como "un hombre con todas las letras".

Sin embargo, el 3 de enero se conoció que la pareja había tenido una escandalosa separación a causa de una serie de actitudes de Bustin. Días después, Alfano fue entrevistada por El País en Punta del Este y aseguró que se encontraba en un impasse con el uruguayo. "Uno hace introspección, piensa qué quiere. En ese momento estoy y después veremos", aseguró.

El 10 de enero confirmó el final definitivo de la relación. "Estoy separada, completamente. Confirmo esa separación. Yo venía viviendo situaciones bastante complicadas... Viví momentos maravillosos, como en toda relación, que hay que valorizar", le dijo a LAM. "Él coqueteaba, se levantaba a mujeres en mi cara. Yo no podía creer que estuviera pasando, me quedé como boleada y yo no soy ninguna estúpida. Adelante mío le dio el teléfono en un papel a la anfitriona, para que lo llame. Yo se lo dije: me tendría que haber ido ahí”, agregó.

Este lunes, Alfano volvió a hablar del tema en una entrevista con Algo contigo, sumando más detalles a este turbulento episodio. "Una persona traicionera elige traicionarte y no lo hace porque seas flaca, gorda, joven o vieja", aseguró. "Pasa porque esa persona elige decirte que tiene una relación exclusiva, pero no la tiene. Y yo creo que una debe poner el límite porque si no lo hacés, te vas de mal en peor. Eso es lo que me pasó a mí hace unos meses, que yo debería haberme ido".

"Frente a cosas tan graves hay que retirarse y buscar el grupo de apoyo en las amigas y en la gente honesta que está contigo porque te quiere", remarcó. "Una tiene que confiar en sus capacidades y salir de esos lugares de menosprecio y de basureo, que fue lo que me pasó. Yo puedo mostrar mi vulnerabilidad porque soy una persona muy segura, entonces no me molesta decir que alguien coqueteaba en mis narices; que se levantaba a otras personas".

Luego, brindó más detalles. Aseguró que tuvo "un cumpleaños espantoso", donde vivió "situaciones muy feas de maltrato psicológico y violencia pasivo-agresiva". "Pasé cosas espantosas que no se las deseo ni a mi peor enemiga, pero hay que salir adelante", agregó.

Sobre su cumpleaños, comentó: "Me dijo que iba a festejar mi cumple, pero había poca gente y no había nada. Era una picada, nada más. Las mesas estaban vacías y el jugo de naranja era solo para los tragos. Una amiga tenía hambre y le dieron una pascualina porque no había nada más. Era una fiesta en un barco gigante, que parecía el Titanic y al final era pochoclo en la chalupa".

Alfano aseguró que esa noche vio "un coqueteo" de Bustin con una chica de 18 años que tildó de "patético" y que molestó a sus amigas. "Después hubo un brindis por nuestro compromiso, y él (Carlos), dijo: 'Ay, pero no tuve plata para comprar los anillos'. Todos se ríeron de mí. Entonces, ¿estaba en un universo paralelo? ¿Me estaban despreciando?".

Graciela Alfano besando a su novio, el uruguayo Carlos Bustin
Graciela Alfano junto a su expareja, el uruguayo Carlos Bustin.
Foto: redes sociales

También contó otra situación ocurrida en Miami, cuando el empresario invitó a una amiga de su hija al viaje. "Los dos estaban en traje de baño en el apartamento... ¿qué era eso? Él con mujeres jóvenes y coqueteos horribles", lamentó.

"Hubo otras situaciones más y vos te ponés tóxica porque querés poner un límite", admitió. "Empezás a los gritos porque no te dan bola y después la tóxica sos vos. Llegó un momento en que dije: 'Pará, estoy pasándola como el verdaero tuje, y yo no soy así. Me tengo que ir'. Así que agarré mis valijas y, sin decir nada, me fui. Ya estamos separados y lo borré de mis contactos".

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