Redacción El País
Un momento insólito vivieron este martes los protagonistas de la comedia No te vistas para cenar, cuando fueron víctimas de un robo a mano armada en un centro cultural del barrio porteño de Palermo. Christian Sancho, Gladys Florimonte, Celeste Muriega, Nicolás "Tacho" Riera y Lali González, los protagonistas de la obra que se estrenará el viernes 27 en un teatro de Villa Carlos Paz, fueron sorprendidos por dos ladrones mientras ensayaban el espectáculo.
Según informan medios argentinos, los actores fueron sorprendidos por dos ladrones que irrumpieron en el recinto a mano armada y que se llevaron, entre varios objetos, el celular de Florimonte, anillos, dinero y hasta un reloj de oro. Antes de irse, los obligaron a filmar un video en el que saludaban "a los pibes de La Matanza".
En diálogo con TN, Florimonte brindó detalles de lo ocurrido. "Nos robaron todo. Estábamos en la sala de ensayo y sentimos que alguien había subido. Pero pensábamos que era la dueña del lugar. Se metieron directamente con un revólver y nos pidieron que les diéramos todo lo que teníamos. Yo les di los dos teléfonos y me sacaron los anillos de oro", explicó. "Nos apuntaron y nos sacaron todo lo que teníamos porque nos amenazaron con ‘llevarse a uno puesto’. Estábamos todos temblando".
“Nos hicieron grabar videos con saludos para la gente de La Matanza. Después de eso, nos dijeron que nos tiremos al piso. Y nos dijeron: ‘En media hora se levantan’. A los cinco minutos estábamos todos temblando. Llamamos a la policía que vino de inmediato, por eso quiero destacar su laburo porque vinieron enseguida", agregó la actriz.
Florimonte contó que pudieron comunicarse también con el productor de la obra, Claudio Cabré, quien acudió al rescate del elenco. “También estaba con nosotros Lía Jelín, la directora, que la hicieron tirar ahí también. Ella tenía el teléfono en la cartera y no se dieron cuenta de eso. Entonces pudimos llamar al productor y a la policía. Con el teléfono de ella también pudimos bloquear nuestros teléfonos y llamar a los bancos para que bloqueen las tarjetas”, detalló.
Sancho, por su parte, dijo: “Tenemos que agradecer que no nos pasó nada, pero tener a una persona nerviosa, apuntándote durante casi diez minutos, me parece que es algo que no quisiera vivir nadie".