RESOLUCIÓN
La comunicadora, ex "La letra chica", cuestionó la resolución de la comuna que absoluvió a la directora de TV Ciudad. "No esperaba otra cosa", dijo.
La Intendencia de Montevideo concluyó su investigación administrativa y resolvió que "no existió violencia" de parte de la directora de TV Ciudad, Alejandra Casablanca, en contra de Denisse Legrand, como había denunciado en julio la conductora de La letra chica.
La resolución, firmada por Ernestro Beltrame, director de jurídica de la comuna, indica el archivo de las actuaciones sin "atribuir responsabilidad a funcionario alguno". La resolución fue emitida el 29 de setiembre, el mismo día del final de La letra chica que adelantó su cierre de año.
Conocido el fallo, Denisse Legrand lo cuestionó. "No esperaba otra cosa, es una investigación llevada adelante por la propia gestión donde la denunciada es una jerarca a la que respaldaron desde el primer momento. Incluso mediaron para ofrecerme las disculpas de Casablanca y que las acepte en lugar de presentar una denuncia", dijo.
Legrand había argumentado que ante una inquietud suya de incidir en los contenidos del programa, ofreció su renuncia y luego mantuvo una reunión con Casablanca, donde se habría producido el episodio denunciado.
La IM, en cambio, niega que Casablanca haya ejercido violencia. "Respecto de la reunión mantenida entre la Sra. Legrand y la directora del canal TV Ciudad, y los términos en los cuales tal reunión se desarrolló, se concluye que no existió violencia ni hostigamiento alguno, sino la conversación de dos personas con diferentes posturas ante una situación determinada", asegura la resolución.
El texto se centra en una palabra (que no menciona) y que le habría dirigido Casablanca a Legrand. "No constituye una situación de violencia el empleo del término utilizado por la directora del canal TV Ciudad en relación al uso de las redes sociales por parte de la denunciante, en tanto dicho término es sinónimo de gresca, desorden, barullo y con esas acepciones se emplea cotidianamente en la mayoría de las conversaciones en las que se utiliza tal palabra", dice el texto, aunque evitó mencionarla.
"Si no es violencia que te presionen para renunciar —y después para denunciar—, que te insulten, que te griten, que hagan averiguaciones de tus antecedentes, que se metan con tus otros trabajos, que te dediquen publicaciones en redes sociales y que la línea jerárquica defienda a quien es denunciada…? no sé que es violencia", estimó Legrand.
La comunicadora hace referencia a la consulta que hizo Gabriel Romano, asesor de la Intendencia, a las exautoridades del Ministerio del Interior sobre si Legrand tenía antecedentes de "conflictividad" en su rol dentro de la organización Nada crece a la sombra. Como la resolución no emite nada al respecto de esto que forma parte de la denuncia, Legrand dice entender que la IM respalda “que un asesor haga averiguación”.
La resolución de IM también establece que Legrand fue contratada como conductora de La letra chica, lo que no implica roles de decisión en términos de producción de los contenidos del programa.
De todos modos, añade el documento: "La participación de los conductores en los contenidos del programa, temas e invitados era posiblemediante el intercambio de cada conductor con el equipo de producción en forma previa a cada programa, extremo respecto del cual resultan contestes los testimonios vertidos en afirmar que la denunciante no tuvo esa actitud".
Sin embargo, Legrand señala que no había reuniones entre producción y conducción. Según dice, hubo dos en el año y ambas fueron a instancias de ella. Una la solicitó en marzo y se la dieron en mayo, y la otra fue el mismo día del episodio con Casablanca, en que la directora del canal le pidió que pasara por su oficina después de mantener esa reunión.