CONFESIÓN
La actriz participó del programa "Todo Pasa" y habló de su juventud en Estados Unidos y cómo fueron esas horas en la casa de la conocida estrella
La actriz Julieta Ortega recordó una de las anécdotas más insólitas de su vida: el día que terminó, sin querer, en la casa del legendario actor de Hollywood Jack Nicholson. En una entrevista con el programa Todo Pasa (Urbana Play), la actriz rememoró sus años de juventud en Estados Unidos y relató cómo fueron esas horas en el hogar de la reconocida estrella.
"Yo viví sola en Los Ángeles en los ‘90?, dijo Ortega. "Te quiso levantar Jack Nicholson”, apuntó Clemente Cancela y la actriz asintió: "Exactamente. O sea, yo podría haber sido un bardo y no sabés lo que fui. Estaba con otra amiga, encerradas, no íbamos a ningún lado", aseguró. Desde su experiencia, la ciudad californiana es enorme, pero es muy diferente a Nueva York. "No es que salís a la calle y pasan cosas: no pasa nada. Tenés que ir a fiestas, a lugarcitos, y para eso tenés que conocer gente. Yo no conocía a nadie, vivía encerrada con mi roomate mexicana", explicó.
El incómodo momento en la casa de Jack Nicholson
Sobre la inolvidable noche en la que terminó por accidente en la mansión de Nicholson, reflexionó: "Eso te puede pasar en Los Ángeles, caer en la casa de alguien así". Y remarcó: "No me lo voy a olvidar en mi vida y encima no había teléfonos. Yo decía, ‘no puedo creer que no voy a tener una foto’. Porque aparte en un momento empecé a dar vueltas por la casa y no me estaba viendo nadie, podría haber fotografiado toda su casa y mandársela a todos mis amigos actores que cuando llegué no podían creer la historia. Y pensaba, ‘¡no tengo una foto!’".
Ortega contó que en su recorrido por el hogar del protagonista de El resplandor (1980) vio de todo. "Tiene drogas, vi drogas", reveló. "Tiene relojes de oro, tiene un pijama de seda y pantuflas, y habanos. Vi todo, vi los baños, todo, todo", insistió. Luego, contó cómo fue que llegaron ahí. "Estábamos con un amigo de mi amiga, que dijo ‘vamos a pasar por la casa de un amigo’. Después nos dimos cuanta de que era todo una emboscada, nos llevó a ver si alguna se quedaba ahí -explicó-. Cuando nos dimos cuenta nos fuimos, pero estuvimos como cuatro horas escuchándolo hablar, porque él trabajó muchísimo para ver quién arrimaba".
"En un momento dijo: ‘Ponganse cómodas, hagan lo que quieran, ¿quieren meterse al jacuzzi?’ Yo me metí porque dije ‘tengo que hacer uso de todo’. Fui al baño, abrí un cajón y había trajes de baño de mujer, varios para elegir", recordó la actriz de 49 años. Y dijo que antes de darse cuenta de dónde estaban, su amiga, que sabía mucho de arte, advirtió que los cuadros que colgaban de las paredes eran originales. "Me dijo: ‘no sabés el arte que hay en esta casa, esto es un Picasso’", relató.
Julieta aclaró que no pasó nada y que lo dejó hablar a él. "Era bastante interesante todo lo que estaba contando, historias de todas las películas, de su romance con Anjelica Huston", recordó. Haciendo memoria, dijo el hecho ocurrió en el año 2000, cuando ella ya no vivía en Los Angeles.
"(Nicholson) estaba un poquito encerrado, había tenido un hijo con una mesera que vivía al lado y era el Día de Acción de Gracias", indicó. Y agregó: "Me dio mucha tristeza porque el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos es una fecha muy importante, es como Nochebuena. Y estaba solo, drogándose, para ver quién se quedaba".
La señal para irse llegó cuando su amiga la miró y le dijo "vámonos", y ella le hizo caso sin dudarlo. "El amigo empezó a transpirar porque le falló el plan y el otro (por Nicholson) se quedó enojado, ni nos despidió, se quedó arriba", reveló Ortega.