Sara Yañez, EFE
Sarah Jessica Parker cumple hoy 60 años, marcando así cinco décadas de una trayectoria que ha dejado huella en Broadway y en la gran pantalla, pero sobre todo en la televisión al convertirse en un icono popular gracias a su interpretación de Carrie Bradshawen Sex and the City.

Su primer trabajo remunerado fue un papel protagónico en una adaptación de la NBC de 1974 del cuento de hadas de Hans Christian Andersen La niña de los fósforos, que se filmó en Cincinnati, y consiguió subirse a su primer escenario de Broadway dos años después, a los once años, para participar en una reposición de la obra Los inocentes.

A los 14 años, en una entrevista por su papel que protagonizó como Anni' en Broadway, Parker ya señalaba su amor por la ciudad de Sex and the City: “Me gustan mucho los arcoíris y me gusta la ciudad de Nueva York”, recalcaba entonces la joven actriz originaria de Ohio.

Siendo adolescente interpretó a una aplicada estudiante en la serie de CBS Square Pegs (1982-1983), donde coincidió con Cynthia Nixon, quien años después sería una de sus mejores amigas en Sex and the City.

Su salto a la gran pantalla lo dio en los ochenta con Somewhere, Tomorrow (1983), Footloose(1984) y Mi familia o mi amante (1984), cinta que coprotagonizó junto a Robert Downey Jr., quien se convirtió en su pareja hasta 1991.

Parker dejó los papeles de adolescentes para empezar a interpretar en la gran pantalla a bellas mujeres rubias que no destacaban por su gran intelecto, como una bruja de mente distraída en Abracadabra (1993), una cazafortunas en El club de las divorciadas (1996) o una reportera enamoradiza en ¡Marcianos al ataque! (1996) de Tim Burton con quien había trabajado en Ed Wood (1994).

También se dio a conocer por su vida amorosa en el verano de 1991 cuando los paparazzi la perseguían por todas partes para saber más sobre su romance con John F. Kennedy Jr., el hijo del presidente asesinado John F. Kennedy.

“No tenía ni la menor idea de qué era la fama real”, dijo entonces en una entrevista con Times, y añadió: “Cuando muera, dirán: 'Ah, sí, Sarah salió con John Kennedy’”.

Fue en 1997 cuando Parker escuchó hablar por primera vez sobre la posibilidad de hacer una nueva serie para HBO sobre cuatro mujeres solteras en la treintena que le sacan el máximo partido a la vida social de La Gran Manzana; una adaptación de una columna del New York Observer de Candace Bushnell (que escribía con el seudónimo Carrie), que luego se convirtió en libro.

Parker protagonizó y narró los 94 episodios de las seis temporadas de Sex and the City (1998-2004) llegando a ser también productora ejecutiva.

“Gracias. Nunca he ganado nada en mi vida”, dijo tras llevarse el Globo de Oro en 2000 por su interpretación de esta columnista, fumadora empedernida y amante de los Cocktail Cosmopolitan.

Sex and the City se convirtió a lo largo de los años en un símbolo de libertad sexual, glamour y moda.

Parker comparte con Bradshaw el amor por un lujoso guardarropa. Ha asistido 11 veces a la selecta Met Gala y para presentar los MTV Movie Awards en 2000 se cambió más de 10 veces.

La actriz, además, tiene su propia línea de zapatos, SJP, y una tienda a tan solo unos metros de la casa de Carrie Bradshaw en la serie, en el barrio de Greenwich Village. Parker vive en el mismo vecindario con su marido Matthew Broderick y sus hijos.

La serie también se tradujo en dos películas -Sex and the City: La película (2008) y Sex and the City 2- y en una nueva serie secuela And Just Like That...que se estrenó en 2021 y su primera temporada batió un récord de streaming para la plataforma Max.

La actriz explicó a The New Yorker en 2023 que sigue interpretando a esta osada columnista porque encuentra el material “inconfundiblemente rico”, pero también por lo que parece ser un peculiar sentido de la responsabilidad.

La que no volvió a la secuela fue Kim Cattrall (que interpretaba en la serie y películas originales a Samantha Jones, el otro personaje central de la saga) rompiendo así al inseparable grupo de cuatro amigas, algo que decepcionó a los fans de la serie que convirtió a Parker y la forma de vida de su personaje en una tendencia mundial, antes de las redes sociales.