Redacción El País.
Marcela Feudale fue durante décadas la voz de Videomatch y Showmatch. Aunque con mayor participación en la época del humor, la voz de la locutora nunca se silenció y tuvo siempre participaciones activas en el programa, desde cerrar o abrir bloques a improvisados diálogos con su conductor Marcelo Tinelli.

Sin embargo, en las últimas semana la histórica "Enana" Feudale decidió cerrar su historia con la productora de Marcelo Tinelli y no aceptó formar parte del Cantando 2024 que LaFlia tiene al aire en América TV.

¿Qué pasó? Feudale fue entrevistada por Ángel De Brito en el canal de streaming Bondi y reconoció algunas situaciones tensas y enojos con Tinelli durante las grabaciones.

“En algún momento me enojé yo. En algún momento me entré a enojar yo con todo, con el programa, con todo, con la gente. No quería estar más ahí, miraba todo desde afuera”, dijo la locutora al referirse al programa.

Ante la insistencia de De Brito, Feudale profundizó: “Me enojé porque sentía que era como una planta, que decían, ‘traigan a Feudale que llueve’. ¿Me entendés? Empecé a sentir eso por parte de la producción, por parte de Marcelo, por parte de todos. ‘Reíte, boluda, dale’. Me enojé durante muchos años, y estaba muy tensa”.

En ese momento, decidió continuar a pesar de la incomodidad. “Me quedé, pero puteando todo el día. El hecho de cambiarse en un pasillo, vos te cambiás atrás de un perchero porque tenés onda. Ahora, cuando pasan 30 años y vos te seguís cambiando atrás del perchero y a nadie le preocupa, decís ‘pero la put… que te parió hermano, ¿te tengo que pedir un camarín?”, relató su molestia con el trato que recibió en el programa.

En otra parte de la entrevista, Ángel De Brito le consultó a Marcela Feudale su opinión sobre los distintos conductores de la televisión argentina de hoy en día. Sin duda, el primer nombre que soltó fue el de Marcelo Tinelli. Entonces, la palabra que eligió la locutora fue determinante. “Licuado”, lo llamó.

Cuando el conductor le pidió que ahondara más en el tema, Marcela relató: “Yo conocí a un Marcelo que vos lo mirabas y llenaba el espacio. Era el conductor por excelencia”.

“Yo lo veo como que perdió la imagen tan potente que tenía”, arremetió y, cuando De Brito le enumeró si sentía que era por fútbol, política o el paso del tiempo, Marcela aseguró: “Yo siempre le dije que el fútbol no era para él. Era peligroso para su imagen. Cuando fue lo del 38-38, lo miré y le dije ‘no tenías nada que ver con todo lo que pasó ahí adentro'”.

Entonces, Ángel le mencionó que, por ese motivo, Marcelo no estaba tan enfocado en la conducción de su programa. “Entrábamos a las 10 de la mañana, nos íbamos a las 12 de la noche y habíamos grabado un programa. ‘¡Se suspende la grabación!’. Se iba a hacer una reunión y nos dejaba a todos esperando para volver”, explicó Feudale.

“Yo no sé si él es consciente de lo que digo yo, por ahí lo vive más relajado y es mejor. Esto de que la gente decía ‘por acá pasó Marcelo porque huelo el perfume’. Era esa la presencia permanente a la distancia, de divo. Siempre fue divo, más cuando se fue convirtiendo en empresario”, cerró.