Redacción El País
Shannen Doherty, figura icónica de la televisión estdounidense en la década de los noventa, falleció el 14 de julio de 2024, a los 53 años, tras unalarga batalla contra el cáncer. La triste noticia fue confirmada por su publicista, Leslie Sloane, a la revista People.

“Con gran pesar confirmo el fallecimiento de la actriz Shannen Doherty. El sábado 13 de julio perdió la batalla contra el cáncer tras muchos años de lucha contra la enfermedad”, escribió Sloane.

Según detalla el comunicado, la actriz estadounidense estuvo acompañada de sus seres queridos hasta el final: “La devota hija, hermana, tía y amiga estaba rodeada de sus seres queridos, así como de su perro, Bowie”. Su familia pidió privacidad para poder transitar y llorar en paz este momento de dolor.

Recibió el diagnóstico de cáncer de mama en 2015 y, tras una lucha intensa y pública, la enfermedad se extendió a los ganglios. En 2016 se realizó una masectomia y luego se sometió a tratamientos agresivos, incluyendo quimioterapia y radioterapia.

En abril de 2017 anunció que su cáncer estaba en remisión y tres años después volvió a aparecer. En 2023 hizo público que el cáncer le había afectado el cerebro y luego a los huesos. Falleció ayer tras una larga e incansable lucha.

Doherty nació el 12 de abril de 1971 en Memphis, Tennessee, se destacó por su versatilidad y carisma en la pantalla. Su carrera despegó con el papel de Brenda Walsh en la afamada serie juvenil Beverly Hills, 90210, que comenzó a emitirse en 1990, y le valió gran fama y popularidad entre los adolescentes de la época.

Ese recordado rol donde era la hermana de Brandon la catapultó a la fama. Y tras ese mega suceso, Doherty continuó su carrera con el papel de Prue Halliwell en la serie de fantasía Hechiceras, que comenzó en 1998. En dicha ficción, Doherty se puso en la piel de una de las tres hermanas brujas y su interpretación le valió gran reconocimiento y elogios.

Además de sus papeles en televisión, Doherty también tuvo incursiones en el cine, participando en películas como Escuela de jóvenes asesinos (1989), una comedia negra que se convirtió en un clásico de culto, y en varios proyectos independientes que mostraron su capacidad para abordar una variedad de géneros.