Redacción El País
El humorista y comunicador Pablo Fabregat fue invitado al programa Se arregla el mundo de Fipo TV, donde repasó su carrera, su trayectoria y habló sobre El Tío Aldo, su personaje más emblemático. Durante la charla, surgió el tema de los límites en el humor y Fabregat confesó que, para evitar la cancelación, ha tenido que ajustar sus shows. "Es una lucha diaria", aseguró.
A continuación, destacó que la cancelación sigue siendo un fenómeno muy presente y citó como ejemplo el escarnio que sufrió su colega, el comunicador Rafa Villanueva días atrás. Este se vio envuelto en un accidente automovilístico en el que, lamentablemente, un motociclista perdió la vida y la mujer que lo acompañaba resultó gravemente herida.
"Ves la noticia y la gente sin saber escribe: 'Que vaya preso'. Nadie que choca sin querer va preso. Si va mamado sí, o si cometió algún delito en la norma de tránsito. Pero ya la gente decía, 'tiene que ir preso'. Pero no estaba ni con una copa encima, iba perfecto, el celular sin batería", comentó Fabregat.
El conductor de Canal 12 y Del Sol también opinó que existe una tendencia en la gente de ser implacable, con la intención de destruir la carrera o incluso la vida de alguien. "La gente está en la saña. Si una persona lee esos comentarios, seguro pensará: '¿Qué hice para que me odien? Puede que no les guste lo que hago, pero no para querer meterme preso'", reflexionó.
Fabregat sobre la polémica de Campiglia y los riverenses
En otro tramo de la entrevista, Pablo Fabregat recordó el famoso episodio que vivió en La mesa de los galanes (Del Sol) debido a un chiste de Edison Campiglia, el personaje interpretado por Rafa Cotelo, que incluso llegó hasta la Justicia. Durante la pandemia, Cotelo se refirió a los riverenses como "retardados" y sugirió que el departamento podría ser declarado territorio brasileño, ya que "matarlos queda feo".
Fabregat, quien estaba al aire durante esa intervención que generó un escándalo público y un posterior pedido de disculpas, recordó que la demanda contra ellos se presentó sin que los demandantes escucharan realmente el contenido del programa.
"Abrieron, vieron la foto del banner, que era de un año atrás, y ni siquiera escucharon el programa para ver a quién estaban demandando. Demandaron a Eye (Gonzalo Eyherabide), que ya no estaba en el programa, y a uno que estaba al aire no lo demandaron. Está bien que hayan hecho la demanda, yo también la hubiera hecho, pero por lo menos escuchen los nombres, pónganle cariño", concluyó Fabregat.