Por Nicolás Lauber
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Hace 85 años, el mundo cambiaba sin saberlo. Y por una razón, de antemanos intrascendente: el 18 de abril, de 1938 se publicaba la primera edición de Action Comics, la revista que tenía en su portada a Superman.
Desde ese debut el recién llegado se insertó rápidamente en la cultura popular: la invasión actual de superhéroes en el cine, la televisión y el streaming, se debe a ese número de esa revista.
Estados Unidos transitaba la salida de la Gran Depresión. En los primeros números, Superman lucha contra banqueros, ladrones y gangsters, los villanos de ese momento.
Superman tenía superfuerzas pero no volaba, solo saltaba alto y era un defensor de la clase trabajadora.
“Lo que logran Jerry Siegel y Joe Shuster al crear Superman aunque en el momento no lo sabían, era la quintaesencia del superhéroe”, le dice a El País el periodista y especialista Ignacio Alcuri. El personaje reúne todo lo que define a este tipo de héroes: una identidad secreta, poderes especiales, un traje y un nombre.
Esa combinación fue imitada muchas veces (Shazam, Capitan Marvel y Hiperion), pero no superada.
Sus primeras historias son repetitivas y nunca existe la duda respecto a si el héroe será derrotado, porque es el único con superpoderes. La incertidumbre radicaba en cómo Clark Kent iba a lograr escaparse de Lois Lane para que la reportera no descubriera su identidad secreta.
En poco tiempo se convirtió en un icono muy fuerte: el azul, amarillo y rojo de su uniforme y su lucha contra el mal. Para muchos, esa combinación lo vuelven poderoso pero también inocentón.
“Eso es raro, porque la gente no acepta que alguien que tenga mucho poder, no se corrompa automáticamente. En ese sentido, Superman es un personaje muy interesante”, comenta Alcuri.
Superman, una creación de todos.
Como si se tratara de un mito griego, donde no hay un único autor y un mismo personaje tiene distintas versiones sobre su origen, Superman también es creación de muchos autores y dibujantes.
“A diferencia de Dragon Ball, que es la creación de Akira Torijama, Superman se parece a los héroes clásicos en el sentido de que en estos 85 años ha tenido reversiones clave para mantenga su vigencia”, define el dibujante uruguayo Nicolás Peruzzo.
Pocos años después de su primera publicación surgió una radionovela sobre Superman en la que se introdujo el concepto de Kriptonita. En esa época también irrumpieron los supervillanos.
“Hoy parece de perogrullo, pero en los cómics de la década de 1940, Superman solo peleaba contra gangsters o ladrones de bancos, porque los creadores inventaron al superhéroe pero no se dieron cuenta que también necesitaban a su némesis”, dice Peruzzo.
El personaje fue mutando y adquiriendo nuevas habilidades (como una visión de rayos X, la capacidad de volar y un aliento helado) que se acompasaban al contexto de la época. Durante la Segunda Guerra Mundial, por ejemplo, fue un superhéroe netamente patriótico. Para la década de 1950, cuando la gente se había cansado de las historias bélicas, se convirtió en el policía bueno para luego virar hacia las aventuras de ciencia ficción.
Más allá de las épocas, Superman logró convertirse en un modelo, en lo mejor a lo que podemos aspirar a ser como especie humana, pese a que el referente es un extraterrestre kriptoniano.
Si bien fisionómicamente Superman es el mismo desde ese primer número, muchas de las características que hoy se asocian al personaje, son posteriores, de otros autores y aparecieron en otros medios. Superman ha tenido programas en radioteatros, televisión y cine, abarcando todas las formas posibles de entretenimiento.
En los setenta el personaje tuvo un revival cinematográfico gracias a las películas de Christopher Reeve. Además, en los ochenta tuvo un reinicio de la mano de John Byrne, un autor clave que poco antes había relanzado los X-Men. Luego de esos personajes de Marvel, Byrne decidió hacer lo mismo con Superman.
“Lo transformó en un personaje más acorde a la década”, define Peruzzo. “La serie de televisión Lois & Clark estaba inspirada en esta versión donde, a diferencia de las anteriores, Clark Kent se hacía el tonto y Superman era el crack. Además, en esta nueva versión se plantea que él siempre es Clark Kent y Superman es un alterego puntual que usa cuando necesita usar sus poderes. Además, Clark es más decidido y no tan tímido”.
Después de la llegada de Donald Trump a la presidencia con su discurso tan anti-inmigración, Superman vuelve a transformarse. Esencialmente siempre fue un inmigrante que, como forma de protesta, se reivindica como un hijo adoptivo de Estados Unidos. “Superman siempre ha tenido cierto anclaje en cada una de las épocas y esa es una de las cosas por las cuales siempre ha sido relevante más allá de su mito inicial que no deja de ser la relectura de algunos mitos judeo cristianos”, dice Peruzzo.
Padre del multiverso.
Si bien multiverso es una palabra que hoy suena en todos lados, la idea de mundos paralelos surge en los años cincuenta, y tiene a Superman (también a Batman) como sus primeros exponentes.
Cuando se tiene un personaje tan poderoso como Superman es fácil pensar qué pasaría si se conviriera en un villano. Los guionistas y dibujantes de hace 70 años también lo pensaron e imaginaron en historias alternativas. ¿Qué hubiera pasado si hubiera caído en la Unión Soviética en vez de Kansas o si hubiera sido criado por los padres de Lex Luthor en vez de la familia Kent?
Esencialmente, Superman es una buena persona y por eso, para imaginarlo corrupto habría que pensarlo en universos alternativos y en cosas extremas que hagan que cambie. En un videojuego, Lois Lane es asesinada y Superman se convierte en un dictador.
“Es el más poderoso del planeta, y porque fue criado por buenas personas no se convierte en un dictador. Hay gente que considera eso poco creíble, pero es porque hay un cinismo muy fuerte. Por eso parece ridículo que uno personaje con esas características no se convierta en villano”, dice Alcuri.
Más allá del universo en el que se encuentre o en el medio que se publique, lo más interesante de Superman es que siempre intenta, por encima de todo, hacer el bien.
Superman para ver en streaming.
En la plataforma de streaming HBO Max hay varias películas y series sobre el histórico personaje. Allí están, por ejemplo, las películas de Christopher Reeve, la que tuvo a Brandon Routh como el kriptoniano, y las más recientes que tienen el rostro y el físico de Henry Cavill. También está la serie Smallville, sobre la juventud del personaje; Lois y Clark, donde el superhéroe también es reportero e intenta luchar contra el crimen sin que se enteren de su identidad; y la más reciente, Superman & Lois, con Tyler Hoechlin como Clark. Además de un montón de dibujos animados.
Para el futuro se espera una nueva película de Superman. Esta vez escrita y dirigida por James Gunn, el nuevo ejecutivo de la división DC. “James Gunn entiende la pureza del personaje y cómo funciona Superman. Estamos todos jugados a que esa sea una historia que le demuestre al público en general que un personaje como Superman puede funcionar en el cine”, supone Alcuri.
La revista que inició la fascinación por los superhéroes
Antecedentes de las historietas hay desde hace varios siglos, aunque los cómics comenzaron a aparecer en los diarios a fines del siglo XIX. Más adelante, en las primeras décadas del siglo XX, surgieron las primeras protohistorietas de superhéroes como las creaciones de Lee Falk, Mandrake el mago y The Phantom, que se convirtieron en un éxito de ventas.
Algunos editores, entendiendo que había un negocio en los cómics, comenzaron a hacer separatas especiales antológicas que reunían a varios personajes. Así fue que en abril de 1938 salió Action Comics, iniciando lo que hoy se conoce como la “Edad de oro del cómic”, que se extendería hasta 1956. En 1939 surgió Detective Comics y apareció Batman. Ese año también surgió Timely Publications (con los personajes Namor y Antorcha humana) que en la década de 1960 pasaría a llamarse Marvel Comics.
“Lo que sucedió con ese número fue una revolución inmediata a tal punto que en los siguientes 15 años, fue el género más popular en historietas. El cómic era una forma de entretenimiento muy popular en aquel momento, y todo surgió a partir de esta historieta”, comenta el dibujante uruguayo Nicolás Peruzzo, quien es el responsable de la portada del próximo single, "¡A renacer!" de La Tabaré. También tiene una columna en el programa radial No toquen nada de Del Sol.
Su portada, en la que Superman sostiene un auto con sus brazos, se ha reproducido, recreado y parodiado hasta la infinidad.
La importancia también se refleja en que se convirtió un objeto de colección. A inicios de 2022, se subastó una de las 100 copias existentes de Action Comics #1 (Nicolas Cage tiene una) por más de tres millones de dólares.