Todo lo negativo que se encontró al inicio de la sexta y última temporada de la serie Cobra Kai, quedan olvidados gracias a estos cinco nuevos episodios que llegaron este viernes a Netflix. Si las críticas iban por capítulos lentos, más centrados en los personajes y sus dramas que en el karate y la acción, sepa que ahora no hay mucho más que patadas voladoras, piñazos y caídas en el tatami.

Cobra Kai, la serie nacida en YouTube y rescatada por Netflix se encargó de mostrar el otro lado del universo de las películas Karate Kid, generando empatía con el otrora villano de la historia, Johnny Lawrence (William Zabka).

El poder ver las cosas desde la perspectiva de Johnny y verlo tomar impulso hacia una vida mejor fue la mejor forma de reisertar al público a este universo.

La serie, que inicia más de 30 años después de la primera película, se centra en la rivalidad de Johnny con el héroe de la saga, Daniel LaRusso (Ralph Macchio), así como en una nueva camada de karatecas que comenzarán a entrenar, cada uno con su estilo.

Con el correr de las temporadas, Johnny ha logrado encausar su vida, se reencontró con su hijo, se asoció con Daniel, y juntos entrenan a un grupo de chicos que, en los nuevos episodios de la serie, compiten en el torneo más importante del karate, el Sekai Taikai que se realiza en Barcelona.

Footo: Curtis Bonds Baker/Netflix.

Hasta la costa española llega la élite de Miyagi-Do (el dojo de Larusso y Lawrence) para competir en un campeonato mundial que sirve como excusa para ver algunas escenas de acción y peleas bien coreografiadas. También para que Daniel intente resolver un asunto inconcluso sobre el pasado del señor Miyagi, quien aparece brevemente en estos capítulos.

Junto a Daniel y Johnny, viajaron a España los verdaderos protagonistas de la serie, la nueva camada de luchadores: Miguel (Xolo Maridueña), Robby (Tanner Buchanan), Tory (Peyton List) y Samantha (Mary Mouser). También los villanos, con John Kreese (Martin Kove) y la misteriosa sensei Kim (Alicia Hannah), los jefes de Cobra Kai a la cabeza, aunque no son los únicos enemigos que los esperan allá. Sí, Terry Silver (Thomas Ian Griffith), quien fue una de las grandes incorporaciones de las últimas temporadas, continúa ejerciendo su influencia.

Con el honor, prestigio y mucho más en juego, un torneo como escenario y una mezcla de variopintos villanos, el segundo tercio de la última temporada de Cobra Kai es dinámico y contundente.

Foto: Netflix

Estos cinco episodios están muy centrados en ese torneo que tiene en juego el futuro del karate en el valle de Los Ángeles, ya que el Sekai Taikai da prestigio, auspiciantes y locales en todos lados para el dojo ganador.

También aprovechan algunos sitios de interés de Barcelona, como las ramblas y playas, las peatonales y la Catedral de Gaudí. Pero la constante presión por quedar eliminado, y arruinar el sueño de un futuro mejor para varios de los deportistas, genera enredos, rupturas, reconciliaciones y la redención para varios de ellos.

Y como ha ocurrido en estas temporadas, los villanos pueden ser tan perversos como neutrales. La alineación planetaria para el torneo hace algo raro, incorporar personajes nuevos en los últimos capítulos, como el despiadado sensei Wolf (Lewis Tan, de las nuevas Mortal Kombat y Wu Assassins de Netflix), la arrogante Zara (Rayna Vallandingham) o el violento Kwon (Brandon H. Lee). También un personaje secundario de las películas aparece por unos minutos.

Si bien la acción está al frente y cada episodio tiene buenas peleas, hay un poco de drama debido a las consecuencias de algunas decisiones de los personajes (Tory abandonando su equipo, Devon hizo trampa para ir al torneo) que afectan el presente de varios y generan conflictos internos.

Lo cierto es que todos terminan cometiendo errores, pero de ellos aprenden para redimirse. Y este grupo que pocas veces le presta atención al consejo de sus senseis, verá su peor momento para, luego de entender e incorporar algunas enseñanzas que les han dicho desde hace tiempo, poder llegar a la final de ese torneo.

La sexta y última temporada fue dividida en tres partes, ya llegaron dos a Netflix, y en febrero se estrenarán los últimos capítulos de esta genial serie que funciona como homenaje a una saga, tiene karate, y habla de amistad y redención.