DRAMA PERSONAL

El actor cubano William Levy reveló lo complicado que fue equilibrar su vida personal con el trabajo mientras grababa la serie Café con aroma de mujer, la remake de una telenovela clásica que hace varias semanas se encuentra dentro del top 10 de la plataforma de streaming Netflix.

La producción colombiana se convirtió en un fenómeno, como había sido la telenovela original estrenada en la década de 1990,pero detrás de su éxito hay una historia de sacrificio del protagonista, que tuvo que tomar una difícil decisión para poder asistir a las grabaciones.

Esto fue revelado en el programa El Hormiguero que emite en canal Antena 3 (también está disponible en NSNow de Nuevo Siglo), en el paso del actor por España. Allí Levy se sinceró y habló de las dificultades que atravesó para poder darle vida a su personaje, Sebastián Vallejo.

El actor dijo que el momento más complicado de las grabaciones fue cuando su hijo Christopher sufrió un accidente y mientras se recuperaba, Levy tuvo que dejarlo por un tiempo para trabajar, situación que le dolió mucho y que consideró uno de los mayores sacrificios de su carrera.

El actor cubano detalló que antes de iniciar las grabaciones en 2020, el niño tuvo un accidente con un carrito de golf, pero él no pudo estar ahí para ayudarlo a sanar y, aunque sí se mantuvo en contacto a través de llamadas telefónicas y de las redes sociales, no se sintió tan cerca. "Mi hijo había tenido un accidente justo antes de ir a grabar y me tocó dejarlo ahí en medio de todo el proceso", recordó.

Igualmente dijo que pudo hablar con su hijo mientras estaba en el hospital, aunque fue realmente complicado tener que hacer un cambio para concentrarse en sus diálogos y escenas. Afortunadamente su primogénito se encuentra estable luego de un año y medio de recuperación.

"En medio de la grabación pude hablar con él desde el hospital. Pero después tienes que hacer un ‘switch’, cortar todo esto y concentrarte… Fue muy difícil ir a trabajar", dijo Levy y agregó que su hijo ya volvió a jugar béisbol y ya puede pasar más tiempo con él, ya que terminó la serie.

El trabajo no fue el único tema que el actor de 41 años abordó durante su entrevista con Pablo Motos en El Hormiguero. También habló de cómo fue su vida en Cuba, su país natal, y cuáles eran las restricciones con las que estaba obligado a vivir antes de emigrar a Estados Unidos.

Relató que tuvo una infancia muy difícil, con carencias en todos los aspectos. Detalló que a inicios de los años 90 solo comía un pan al día y un cuarto de pollo al mes; sin embargo, decidió cambiar su historia y junto a su familia recibió asilo por parte de Estados Unidos. "Pasé 15 años haciendo dieta obligado por el gobierno", recordó el actor.