Isabella Kwai, The New York Times
¿Qué hace falta para que la Tierra Media de Tolkien cobre vida? En parte, ambición a una escala que rivalice con los cuentos épicos del escritor , si el set de El Señor de los Anillos: Los Anillos del Poder de Amazon es un indicio.
En abril de 2023, la producción de la segunda temporada se extendió por varios sitios alrededor de Windsor. Las vans trasladaron a cientos de miembros del equipo y artesanos entre grandes estudios y bosques. Durante ocho meses, casi 90 miembros del elenco pasaron horas peinándose y maquillándose para transformarse en elfos, enanos, orcos y otros habitantes de la Tierra Media.
Un edificio albergaba estanterías con disfraces y baratijas y armaduras especialmente moldeadas o impresas en 3D. Los escenarios al aire libre del tamaño de patios de recreo sumergían a los actores en una corte en Númenor o en las trincheras de un campamento orco. Y cerca, el equipo esperaba en un campo fangoso para filmar una batalla descarnada inspirada en películas como Rescatando al soldado Ryan.
“No dejaba de decirlo en el set: más sangre, más polvo, más barro, más de todo”, dijo Charlotte Brandstrom, quien dirigió cuatro de los episodios de la próxima temporada.
Después de todo, esta podría ser la serie más cara en la historia de la televisión, una precuela de gran éxito que supuestamente le costó a Amazon 715 millones de dólares por su primera temporada, y estrena hoy los primeros tres episodios de su segunda.
Ambientada miles de años antes de los eventos de la trilogía literaria de El Señor de los Anillos y las adaptaciones cinematográficas de Peter Jackson, la primera temporada deLos anillos del poder establece el período previo a la forja de los famosos anillos y presentó, o reintrodujo, a los espectadores a un conjunto de personajes esparcidos por toda la Tierra Media.
La temporada terminó con el Monte del Destino escupiendo lava y cenizas sobre las Tierras del Sur, transformándolas en Mordor, y el valiente elfo Galadriel (Morfydd Clark) dándose cuenta de que el aparentemente servicial Halbrand (Charlie Vickers) era de hecho Sauron, el supervillano que el elfo había estado cazando. Cuando comienza la segunda temporada, “el tablero de ajedrez está listo y todas las piezas están empezando a jugar”, dijo Patrick McKay, uno de los showrunners.
Para Galadriel, eso significa moder el polvo en la nueva temporada, dijo Clark, y agregó que el elfo debe adaptarse a haberlo hecho “tan mal”, a pesar de su don de previsión. Para Clark, interpretar a uno de los personajes más reconocibles de la trilogía cinematográfica significó seguir “apagando el ruido”. Después de todo, “no puedes intentar hacer lo que hizo Cate Blanchett”, dijo. “¡Ella es Cate Blanchett! Es un partido perdido”.
Para el equipo de producción, el mayor desafío para la segunda temporada fue el listón: “Tenemos que seguir subiéndolo”, dijo McKay.
Eso significó más criaturas de los libros de Tolkien, incluidos los Barrow-wights y los Ents, más escenas de batallas desgarradoras inspiradas en películas de guerra y, sí, más apariciones de esos molestos anillos. Pero la nueva temporada también es una exploración más oscura y psicológica de los puntos en común entre héroes y villanos, y de cómo el mal puede manipular incluso los deseos inocentes.
“Estábamos tan hambrientos de Sauron, de que el mal se extendiera, de villanía”, dijo McKay. “Una parte de nosotros piensa que casi nos pasamos de la raya, pero nos gusta”.
Para Vickers, que interpreta a Halbrand/Sauron, ha sido un cambio bienvenido, esta temporada, saber que está interpretando a un villano, un hecho que descubrió recién en dos episodios de la primera temporada. Esta vez, dijo Vickers pudo habitar más profundamente el papel. “Esta vez me ayudó a entender mejor cómo quería presentarlo”, dijo.
Vickers volverá a interpretar a un Sauron diferente, uno que se le aparece al herrero elfo Celebrimbor. El equipo experimentó con diferentes enfoques para el personaje, incluyendo probar y abandonar una voz más aguda, dijo. A veces, la filmación podría parecer más una obra de teatro, agregó, especialmente las secuencias con Charles Edwards, interpretando a Celebrimbor, cuyos herreros en la tradición de Tolkien aprenden de Annatar a hacer los Anillos de Poder.
“Básicamente estábamos en un escenario, actuando para 100 miembros del equipo todos los días”, dijo Vickers, describiendo las escenas entre los dos como más cercanas a “un drama psicológico” que a la alta fantasía.
La relación de la pareja, una línea argumental clave en la segunda temporada, es un “sabor fresco” para el programa, dijo McKay: “Hay un poco de Hitchcock allí. Y también la sensación de un descenso y una relación muy oscura y tóxica”.
La serie, que trasladó su base de Nueva Zelanda a Gran Bretaña para la temporada 2, ha resistido interrupciones de producción, como gran parte de Hollywood. Los cierres de COVID detuvieron el rodaje de su primera temporada y luego, tres semanas antes del final del rodaje de esta, el sindicato de guionistas de Hollywood se declaró en huelga.
Los showrunners ya estaban produciendo la temporada dos cuando se estrenó la primera temporada, lo que significa que estaban viendo la reacción del mundo: más de 25 millones vieron el programa en su primer día, la audiencia más grande para el debut de un show de Prime Video, según el servicio de streaming. La recepción crítica fue algo mixta, y los devotos de Tolkien, inevitablemente, tuvieron comentarios para los responsables, incluso sobre la cronología comprimida del programa, el ritmo, el casting y los acentos de los personajes.
Los showrunners dijeron que la recepción de la primera temporada afectó a “pequeñas decisiones en el camino”, pero desestimaron gran parte de las críticas de Internet. “Hay infinitas maneras de dibujar a Orión si mirases al cielo”, dijo Payne, comparando lo que Tolkien escribió sobre la Segunda Edad con los puntos de una constelación. “Nos sentimos muy bien por la forma en que lo hicimos”. El ritmo de esta temporada, dijo McKay, “comienza con buen pie”.
En última instancia, dijeron, su objetivo es utilizar varias temporadas de televisión para crear una historia holística que Tolkien nunca escribió como novela: la epopeya sobre la batalla por la Tierra Media, el ascenso de Sauron y quién obtiene el control de los anillos que son tan fundamentales para el futuro de este mundo.