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Series que, parece, pueden durar toda la vida, y otras que ya no están y de las que nunca nos olvidamos (¡ER!). Dramas que pululan en el cable y cada tanto caen en la televisión abierta, o fenómenos de las últimas épocas: las ficciones médicas son un nicho con mucho potencial y siempre hay un público con ganas de verlas, incluso en tiempos de streaming y sobredemanda.

En la diversidad de las plataformas digitales están, por ejemplo, Chicago Med en Amazon Prime Video, The Resident en NSNow de Nuevo Siglo y docuseries como Lenox Hill o Ases del bisturí en Netflix. A continuación, cinco títulos que no hay que perderse.

Llegó a Netflix sin causar mayor revuelo el 15 de febrero de este año, y en cuestión de días estaba entre lo más visto por los uruguayos. Dos meses después, New Amsterdam sigue firme en el Top 10 de tendencias a nivel local, lo que permite ya hablar de fenómeno.

Estrenado en 2018, este drama médico tiene dos temporadas en streaming y se espera la llegada de una tercera ya al aire en la televisión estadounidense. La acción se ambienta en el hospital del título y hace foco en el nuevo director médico, Max Goodwin (Ryan Eggold), que tras acomodarse en su cargo comienza a tomar decisiones radicales en pos de brindar la mejor atención con un financiamiento escaso. Todo sin revelar un asunto personal importante.

De New Amsterdam se dice que es adictiva y que es algo más que una serie de médicos. Que tiene elenco multirracial, que atiende la salud mental y las historias humanas más allá de las cuestiones de medicina, y que deja en evidencia las falencias del sistema de salud sanitario estadounidense. Sobre todo, que está conducida por un idealista con el que el espectador empatiza rápido. Y también se la ha asociado con Grey’s Anatomy, aunque tiene mucho por delante hasta llegar a ser ese tipo de hito.

Es, posiblemente, la serie médica más importante de todos los tiempos y eso, claro, sin desconocer a E. R. Sala de urgencias. En febrero estrenó su temporada 17 (se emite en cable por el canal Sony) y las otras 16 están para ver en Netflix y en Amazon Prime Video.

Grey’s Anatomy se ha caracterizado por la renovación de su plantel tanto como por los golpes inesperados a una audiencia que no gana para disgustos. Sobre todo, ha utilizado la medicina como eje para abordar diferentes problemáticas sociales, y ha puesto en pantalla una camada de personajes fuertes y con matices, como para romper con la unidimensionalidad que suelen ofrecer las tiras de largo aliento.

Como en el caso de New Amsterdam, que tiene episodios actuales, la ficción no le ha escapado al coronavirus, que se hizo presente para protagonizar algunos de los momentos más tensos y angustiantes de todo el relato. Lo mismo pasa en The Good Doctor.

La tercera temporada se emite en Canal 4 bajo el título Un médico brillante, pero la cuarta y última acaba de llegar a Amazon Prime Video, donde están las tres anteriores.

Aquí el diferencial, lo plantea el personaje central, Shaun Murphy, interpretado por Freddie Highmore. Murphy es un cirujano joven, talentoso y con trastorno del espectro autista, que acaba de unirse al San José St. Bonaventure Hospital, donde su carrera profesional y su vida personal deberán encontrar un punto de equilibrio.

“Murphy es listo, brutalmente honesto y no le importa la convención social”, se lo define en esta última temporada y por ahí pasa buena parte del encanto particular de The Good Doctor. Por una figura atípica que tiene evidentes puntos de contacto con otra con la que, justo, comparte “padre”: House, que también es creación de David Shore.

Una de las series que más se desmarcó del resto fue, en el rubro de los dramas médicos, House. Primero, porque le dio a Hugh Laurie su mejor papel; segundo, porque le brindó a la audiencia uno de esos antihéroes que se adoran tanto como se rechazan. El sarcasmo de este genio poco ortodoxo era proporcional a su capacidad de desentrañar los casos más complejos, con una destreza más a lo Sherlock Holmes, un personaje con el que incluso comparte adicciones y el don de fastidiar a su entorno.

House se emitió entre 2004 y 2012 y está para ver en Amazon Prime Video. Siempre disfrutable.

Para romper con la dominación angloparlante, en el básico de NSNow de Nuevo Siglo puede verse una serie española (basada en una británica) que tiene cinco temporadas que terminaron de emitirse en 2011.

Mateo Sancristóbal tiene Asperger y la serie lo encuentra, después de Nueva York, de vuelta en San Martín del Sella, el pueblo donde pasó su niñez y juventud. Entre familia, amores e idas y vueltas de menor impacto, Gonzalo de Castro se carga con el protagónico de una historia mucho más asociada al pueblo y sus habitantes que a las dinámicas médicas en sí.