The Office , la exitosa serie protagonizada por Steve Carell aterrizó de nuevo en Netflix, a 18 años de su estreno original. Disponible desde el domingo 1° de enero, la serie que había salido del catálogo en 2020 quedará allí hasta el primer día de 2025.

Los usuarios podrán disfrutar así de las aventuras de Michael Scott y de los trabajadores a su cargo, quienes conquistaron el corazón de los espectadores hace 18 años y lo siguen haciendo: la serie estuvo en el top 10 de las más vistas en Uruguay en la plataforma.

El día a día de los trabajadores de la empresa de venta de papel Dunder Mifflin, liderados por Scott (Carell), se refleja en The Office con un toque de humor e ironía , con un lado burlón con respecto al trabajo que roza lo absurdo para distraer al espectador de las responsabilidades y la rutina diarias.

Así, Dwight (Rainn Wilson), Pam (Jenna Fischer), Andy (Ed Helms), Ryan (B. J. Novak) o Erin (Ellie Kemper), entre otros, lidian durante nueve temporadas y más de 200 episodios con las polémicas directrices de un jefe cuya posición de líder es muy cuestionada. Es básicamente un tonto con poder. Es tan irritante que es simpático.

La serie es un singular remake de la original, lanzada en Reino Unido en 2001 y de la mano de Ricky Gervais, como creador y gran protagonista . Duró solo dos temporadas y tuvo un importante éxito (y sobre todo un gran boca en boca). Se puede ver en HBO Max.

Cuatro años después, el comediante aceptó realizar una versión norteamericana, pero con un nuevo protagonista, nada menos que Steve Carell, quien logró reconvertir esa historia en un verdadero suceso global.

La tarea no era nada sencilla: la versión oficial contaba con poco más de 10 episodios y el apagado humor de Gervais parecía complicado de traducir a la lógica de las usualmente más coloridas sitcoms norteamericanas. Y quien finalmente aceptó ese desafío, fue el guionista y productor Greg Daniels, reconocido por trabajar en series hit como Los Simpsons, King of the Hill, y por la escritura de un elogiado episodio de Seinfeld, “The Parking Space”. Daniels tenía un sentido del humor preciso, que bebía más de las incomodidades que de las risas amables, y su conducción era la única que podía llevar a esta remake a buen puerto. Pero ante todo, el guionista sabía que el primer paso era el de mostrar respeto a la versión británica, y por eso llevó a cabo la escritura de un guion que en esencia, era una copia del piloto británico.

Daniels escribió un piloto que tomaba los rasgos más importantes de la ficción original: la presencia de un antipático jefe, un subalterno que constantemente intentaba congraciarse con él, otro empleado sutilmente enamorado de la recepcionista del lugar y un desfile de otros tantos oficinistas de rutinas apagadas.

El plan del productor consistía en apoyarse en el carisma de sus estrellas y en la química surgida durante los rodajes para que la sucursal americana de esa oficina levantara vuelo. Y debido a eso es que Daniels necesitaba actores talentosos que se animaran a improvisar y que le dieran a esa remake un perfil definido. El showrunner lo sabía: en gran medida, todo dependía de encontrar al Michael Scott perfecto.

La lista de aspirantes al puesto era larga: entre algunos de los nombres que se postularon estuvieron Alan Tudyk, Nick Offerman, Hank Azaria, Martin Short y Bob Odenkirk. Carell, que por esa época trabajaba en la comedia Come to Papa, también se presentó al casting, pero fue descartado. Will Ferrell finalmente se quedó con el papel, pero terminó por rechazar la oferta, y así fue que Carell volvió a la carga y logró convencer a los productores de ser el Michael Scott ideal.

Cuando la sexta temporada finalizó su rodaje, Carell anunció su retiro. De esa forma, en abril del 2011 y en el episodio número 148, Michael Scott se despedía de Dunder y Mifflin.

The Office nunca fue un boom de rating. Nunca alcanzó los números de The Big Bang Theory o Two and a Half Men. “A la gente le tomó unos 10 años luego del final realmente engancharse con la serie. Cuando estábamos al aire, a nadie le importaba este show, que apenas tenía un núcleo duro de seguidores de unos pocos cientos de personas”, admitió Carell.

Los jefes posteriores, con sus altos y sus bajos, no pudieron llenar nunca esos zapatos (aunque el Robert California de James Spader sí tuvo grandes momentos), y las tramas con Dwight, Jim y Pam (a quienes los guionistas quisieron divorciar) junto al resto de sus compañeros, pronto cayeron en lugares comunes y desenlaces poco elaborados. Ya sin más historias para contar, en mayo de 2013, The Office cerró sus puertas con el capítulo 25 de la novena temporada. Sin embargo, la leyenda apenas empezaba.

En 2020, la serie fue eliminada del catálogo de Netflix para volver recién ahora. El regreso fue anunciado el último día del año 2022 por la cuenta de Twitter de Netflix Latinoamérica , desde donde acompañaron la noticia con un clip de celebración protagonizado por Carell.

En base a La Nación/GDA